La sede del PP saguntino sufrió esta semana un ataque que se saldó con uno de sus cristales rotos. El incidente tuvo lugar a principios de semana. Los responsables del partido han denunciado los hechos a la policía.
Se sospecha que la ventana fue golpeada por el impacto de una piedra o una botella. El vinilo que decoraba el cristal impidió que el mismo se rompiera, aunque quedó totalmente agrietado por el interior.
Esta no es la primera vez que la sede de los populares sufre algún acto vandálico de estas características. El portavoz municipal Sergio Muniesa lamentaba que suelen ser habituales las pintadas en las fachadas. De hecho, hace unas semanas sufrieron uno de estos ataques que les obligó a tener que sustituir todo el vinilo de la decoración.
Muniesa no ocultaba su malestar por este tipo de acciones, no solo por los daños económicos que acarrean sino por las actitudes de intolerancia que se esconden detrás. «Hasta ahora era habitual que nuestras sedes aparecieran con pintadas, pero ahora ya han sido pedradas o un botellazo», señalaba.
A su juicio, este tipo de actos son intolerables en una sociedad democrática. «Al final que cada uno tenga las ideas que considere, pero respetando siempre al que no piense igual. Es lo mínimo para la convivencia», señalaba.
