El ruido se ha convertido en un elemento cotidiano en las ciudades modernas. Tanto que en la mayoría de los casos los vecinos ni siquiera reparan en él tras haberse convertido en un sonido de fondo al que su oído ha terminado por acostumbrarse. Sin embargo, eso no impide que, sin ser conscientes de ello, suframos día a día el impacto de una contaminación acústica que, como toda contaminación, termina teniendo efectos perjudiciales para nuestra salud en forma de insomnio, estrés, irritabilidad, menor rendimiento o, incluso, síntomas depresivos.
Sagunt, en este sentido, no es ninguna excepción y el exceso de ruido también forma parte de su ritmo diario. Así lo pone de manifiesto el Plan Acústico Municipal elaborado por el ayuntamiento y que en su diagnóstico de la situación ha detectado hasta diez zonas con problemas de contaminación acústica. Tras analizar los niveles de exposición acústica, el informe alerta sobre el exceso de ruido que existe en las principales ejes de comunicación de la ciudad motivado por el intenso tráfico de vehículo que se registra en esas zonas.
En concreto, se identifican tres zonas en el Port de Sagunt. Se trata de la avenida 9 d'Octubre y de los dos grandes ejes que forman, por un lado, las avenidas La Vila, Corona de Aragón y Arquitecto Alfredo Simón Gurrumenta y, por otro, Fausto Caruana, Hispanidad y Camp de Morvedre. A ellos se le suman los ejes que unen el Port y Canet por la avenida Jaume Roig y Periodista Azzati. Este mapa de zonas acústicamente negras se completan en el casco histórico con la avenida País Valencià, Camí Reial y las calles Sants de la Pedra, Huertos y Valencia.
El informe va más allá y detecta aquellos puntos especialmente sensibles por incluir usos sanitarios o escolares, donde la normativa sobre ruidos es más estricta y no deberían superarse los 45 decibelios durante el día y los 35 durante la noche para tener unos niveles mínimos de calidad. En este sentido, la zona más crítica es el centro de salud del Raval donde se superan esos límites en 25 decibelios por el día e, incluso, 30 por la noche. También se alcanzan niveles de hasta 75 decibelios en el colegio San Cristobal, por el impacto de la A-7, y en el colegio Camarena del Port, por efecto del tráfico en la avenida Corona de Aragón.
También se superan los niveles de calidad en más de 25 decibelios en los alrededores de la residencia Monte Arse, el centro de salud de Sagunt y en los centros escolares de San Vicente Ferrer, Ausias March y Villar Palasí, Cronista Chabret, Mediterráneo, Begoña, Victoria y Joaquín Rodrigo, Vilamar infantil, Escuela Oficial de Idiomas, Guardería del Niño Jesús, y Eduardo Merello.
Aunque estos serían los puntos más conflictivos, el mapa acústico incluido en este plan pone al descubierto numerosas superaciones más. Así, el trabajo destaca hasta 26 puntos más, en los que se encuentran ubicados colegios y centros sanitarios, donde existe un ruido que se sitúa entre 5 y 20 decibelios por encima de los niveles aconsejables.
Frente a esta situación el Plan Acústico propone poner en marcha más de una veintena de actuaciones correctoras, que abarcan desde restricciones de tráfico a la instalación de pantallas acústicas en puntos concretos.
