Las dolinas son áreas deprimidas donde la temperatura mínima desciende mucho más que los alrededores ya que el aire frío se acumula en su interior y no se puede escapar debido a que estas dolinas tienen forma de pozo. Las temperaturas observadas en las estaciones meteorológicas de aficionados pueden ser mucho más bajas que otros observatorios meteorológicos. Así, la temperatura observada en el invierno de 2013-2014 en una dolina del Cantábrico fue de -31 ºC. En el invierno de 2014-2015 se registró una mínima de -25 ºC en otra dolina. Si tenemos en cuenta que hay muchos lugares sin monitorización meteorológica en la península Ibérica, probablemente la mínima absoluta de -32 ºC del Estany Gento se haya superado varias veces, precisamente en estas dolinas.