Más de 25 años ejerciendo la información medioambiental dan para mucho, incluso hasta el aburrimiento y más allá. La Comunitat Valenciana ha sufrido un verano negro debido a la ¿abundancia? ¿gravedad? y ¿reiteración? de los incendios forestales. Uno más, diría yo. Y los clichés se repiten. El penúltimo lo protagonizaba el director general de la Agencia de Seguridad y Respuesta a las Emergencias José María Ángel anunciando la creación de una unidad especial de la Policía Autonómica para la investigación de causas de incendios. ¿Cómo? Sepan, ilustres lectores, que la Generalitat Valenciana es de las pocas que dispone desde el desastre de 1994 de una unidad específica de investigación de causas de incendios en manos de los agentes forestales, ahora llamados medioambientales, ahora en la Conselleria de Agricultura y Medio Ambiente, antes en la de Interior. La unidad acude a todos los incendios sospechosos y evalúa las causas. Tiene un reconocido prestigio nacional y ha permitido el desarrollo de políticas específicas contra incendios forestales. Como dijo otro valenciano, el Fiscal de Medio Ambiente para todo «el Estado», Antonio Vercher, mal vamos a combatir los incendios si no conocemos las causas. Dicho y hecho: se creó la unidad y ahora sabemos mucho más de las causas reales que en cualquier otra comunidad autónoma. Además, José Maria Ángel, debería recordar que la Policía Autonómica ya tuvo algo parecido a una unidad de investigación de incendios forestales. Uno de los últimos jefes de la Unidad, Luis Turégano, hasta escribió un libro fruto de su experiencia y por ello le entrevistamos en este periódico. ¿Qué hacemos pues? ¿Nos cargamos lo existente? ¿o es que se trata de hacer policías a los agentes? No menos delirante es la respuesta del Delegado del Gobierno Juan Carlos Moragues recordando que la competencia en la investigación de incendios forestales es del Seprona de la Guardia Civil. Da ganas de decirle lo del fuero o el huevo o preguntarle directamente de qué nos ha servido que unos y otros se dediquen a lo mismo. Al anuncio de la nueva unidad podríamos sumar el de que una ley evitará la urbanización de zonas quemadas „ya existente en el caso de la Comunitat Valenciana„, el de que cabe «esperar» a la regeneración natural„lo que nos sitúa en una nueva administración que no se reconoce en lo prometido, sin obviar que hace años sabemos lo que ocurre„, o el de que haremos una normativa „tan vigente como inaplicada (no hay planes de autodefensa)„ para impedir incendios en las urbanizaciones. En fin, el caso es no hacer nada y disfrazarlo de bla, bla, bla, para que parezca que hacemos algo.
