En los océanos se produce aproximadamente la mitad de la fotosíntesis del planeta, llevada a cabo principalmente por pequeñas células presentes en el plancton que contienen clorofila, el denominado fitoplancton. Para poder hacer la fotosíntesis requieren de luz, captada por la clorofila; y nutrientes, elementos esenciales como el nitrógeno, el fósforo o el hierro que se encuentran disueltos en el agua.

En las aguas pobres en nutrientes predominan en general las células de menor tamaño, ya que su pequeño tamaño les confiere ventajas para captar nutrientes en zonas donde escasean. El Mar Balear es una de las áreas con menos nutrientes en el Noroeste Mediterráneo y, sin embargo, hasta el momento se desconocía la abundancia de la fracción del fitoplancton formado por células pequeñas de entre 0,2 y 2 ?m de tamaño: el denominado picoplancton.

Los resultados de este estudio indican que el picoplancton es responsable de gran parte de la producción de biomasa en las aguas pobres en nutrientes que rodean las Islas Baleares, y su abundancia y distribución está relacionada con las distintas masas de agua y su circulación.

El estudio se ha realizado durante la época estival, cuando en el Mar Balear confluye el agua Atlántica que entra por el estrecho de Gibraltar con el agua residente del Mediterráneo, dos masas de agua con distintas características químicas y biológicas.

Los resultados obtenidos muestran que el picoplancton es más abundante en la masa de agua Atlántica, con menos nutrientes que el agua residente. Las altas temperaturas del verano hacen que se puedan distinguir en la columna de agua dos capas principales con condiciones muy distintas: la capa superficial, con mucha luz pero escasez de nutrientes (hasta unos 15-25 m); y la capa profunda, con mayor concentración de nutrientes pero falta de luz (hasta unos 200 m, donde la luz se extingue). La cantidad de biomasa total de fitoplancton es mayor en la capa profunda, donde la cantidad de nutrientes les permite vivir a pesar de la poca luz.