Joan Mestre, Castelló

El Ministerio de Fomento, a través del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), tiene previsto poner fin a los problemas de contaminación acústica que padecen las poblaciones próximas al corredor ferroviario del litoral mediterráneo. En Castelló, Adif ha detectado nueve zonas de siete municipios sensibles a este problema. Entre otras medidas, baraja la instalación de pantallas contra el ruido.

Esta actuación forma parte de la primera fase del mapa del ruido que piensa llevar a cabo el ministerio en la red vial y ferroviaria estatal. Adif acaba de licitar la apertura de las plicas económicas del plan de acción relativo al corredor ferroviario. El estudio contempla primero una evaluación de los niveles sonoros originados por la circulación de trenes, y una segunda parte con las medidas contra el ruido preceptivas. De entrada, ha señalado nueve puntos con una posible afección de contaminación acústica en la provincia de Castelló. Concretamente, dos en la capital de la Plana, dos en les Alqueries, y uno en Xilxes, Almenara, Nules, Vila-real y Almassora respectivamente.

El proyecto evaluará, según recoge el pliego de condiciones, los niveles acústicos en las fachadas de edificios ubicados en las inmediaciones de la vía férrea. Adif pretende analizar «las cuestiones concernientes a la contaminación acústica en la correspondiente área o áreas acústicas, determinar las acciones prioritarias a realizar en caso de superación de los valores límites de emisión, y proteger las zonas tranquilas contra el aumento de la contaminación acústica». El informe tendrá en cuenta las tres partes del día(mañana, tarde y noche). La legislación autonómica establece un límite máximo de 45 decibelios. Los lugares marcados por el ministerio en Castelló pueden superar estos niveles y sobrepasar de lejos los 50 decibelios.

De esta manera, el Gobierno central atiende una vieja reivindicación vecinal y de los ayuntamientos, e intenta compatibilizar el derecho al descanso de los ciudadanos con la existencia de una infraestructura vital como es una línea ferroviaria.

Por ahora, la tramitación del mapa del ruido se acaba de iniciar y aún habrá que esperar un tiempo para que s pertinentes medidas correctoras sean una realidad. El plazo máximo para la realización de los trabajos será de cinco meses a partir de la fecha de la firma del contrato de adjudicación. El plan de acción podría estar listo en poco menos de año. El presupuesto es de 615.000 euros.