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La Ribera sufre un déficit de lluvias del 27 % pese a los últimos chaparrones

La Ribera Baixa se sitúa como el segundo territorio valenciano con mayor anomalía en el último año El ciclo seco alcanza los cinco años

La Ribera sufre un déficit de lluvias del 27 % pese a los últimos chaparrones

El año hidrológico vuelve a acabar con déficit de lluvias en la Ribera y acrecienta el ciclo seco en el que la comarca se haya inmersa desde hace al menos cinco años. Pese a las últimas lluvias de principios del mes de septiembre, que resultaron incluso torrenciales en algunos puntos de la comarca, el período temporal que transcurre entre octubre de 2014 y septiembre de 2015 recoge un déficit de lluvias cercano al 20% respecto a las precipitaciones habituales.

El dato lo incluye la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) en su último análisis sobre el actual año hidrológico.

La anomalía en la precipitación es aún mayor en la Ribera Baixa, donde llega a alcanzar el 27%. Se da la circunstancia de que la Ribera Baixa es el territorio valenciano que acumula el mayor déficit de precipitaciones de toda la Comunitat Valenciana solo por detrás de la Marina Alta, una comarca en la que ha llovido el 38% de lo que es habitual frente al 73% de la Ribera Baixa.

La anomalía de precipitaciones en la Ribera contrasta con el resultado global de la Comunitat Valenciana ya que los expertos califican de «pluviométricamente normal» el período de los últimos doce meses.

La precipitación media en el territorio valenciano es de 520 litros por metro cuadrado, mientras que en la Ribera las lluvias se sitúan por debajo de los 500 litros.

Tres temporales en un año

Más la mitad de la lluvia acumulada en los doce últimos meses se registró en tres temporales, uno a finales de noviembre de 2014, otro en la tercera semana de marzo de 2015 y el último a principios de este mes de septiembre. Sólo el temporal de lluvia de marzo permitió acumular el 90% de las precipitaciones de toda la primavera y el 30 % del total anual. El pasado 3 de septiembre un chaparrón dejó en Alzira 169 litros por metro cuadrado en sólo una noche, cuando por ejemplo esta ciudad no superó los 200 en todo el año hidrológico 20013-2014. Precisamente, el año anterior la situación fue aún más complicada ya que la Agencia Estatal calificó el ejercicio como «extremadamente seco». Fue, además, el que menos lluvias recogió desde 1950.

En ese año la anomalía respecto al régimen de lluvias habitual en base al histórico de precipitaciones alcanzó el 70 % mientras que este año es del 27 %.

Un alivio para el campo

Para la agricultura, las lluvias de septiembre supusieron un alivio. De hecho, este diario ha informado que las reservas en los pantanos han aumentado por encima de las previsiones que manejaba la Confederación Hidrográfica e incluso el pantano de Tous acumula hoy superávit.

Con todo, la sequía meteorológica acumulada en el último lustro ha puesto en alerta diez de los 13 indicadores de sequía de la demarcación Xúquer especialmente tras al complicado año hidrológico 2013-2014.

Además, este agosto las comunidades de regantes más importantes de la Ribera señalaron que podrían producirse restricciones en el riego dentro de un año en la demarcación del Xúquer si se mantiene el ciclo seco.

Respecto a la temperatura del verano, Aemet señala que ha sido muy cálida, más de un grado por encima del valor climático normal y muy húmedo, con casi el doble de precipitación de lo normal. Lo más notable fue la persistencia del calor entre final de junio y final de julio con 45 grados el 7 de julio en Carcaixent.

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