La junta de gobierno de la Mancomunitat de la Ribera Alta aprobó ayer, con la única abstención de Esquerra Unida, una dedicación parcial para el presidente del ente, el socialista Txema Peláez, que aumenta un 10 % las retribuciones que percibía su antecesor. Cristóbal García (PP) tenía una asignación de algo más de 18.000 euros brutos anuales repartidos en doce pagas por una dedicación del 40 %. El nuevo presidente percibirá 20.400 euros distribuidos en catorce pagas de 1.480 ? brutos al incorporar dos extras por esa misma dedicación parcial. El acuerdo contó con el respaldo de todos los grupos políticos, salvo EU, que no ve justificado el aumento.
Peláez admitió ayer que los políticos están en el punto de mira, pero defendió que se trata de una retribución que sigue muy lejos del máximo que se estableció por ley, que en el caso de la Mancomunitat sería equiparable a municipios como Alzira, por lo que el sueldo podría alcanzar hasta 55.000 euros brutos anuales. El presidente destacó que, además de votar a favor la mayoría de grupos políticos, en la junta de gobierno también hubo intervenciones que abogaban por asignar un salario justo a los cargos públicos como forma de dignificar la política. «Formalmente la dedicación parcial es una, pero es muy discutible», indicó, mientras señalaba que siempre se dedica más tiempo del que ésta contempla.
Por otra parte, la junta de gobierno dejó sobre la mesa los presupuestos de 2016 que planteaban un aumento del 20 % en la cuota que pagan los ayuntamientos, a razón de unos 50 céntimos más por vecino. Txema Peláez comentó que todavía no se han concretado las subvenciones que puedan llegar de programas europeos o las aportaciones de otros organismos públicos como la Diputación o la Generalitat, y se había incrementado una cuota que, según dijo, no se había tocado desde el año 2009. Con todo, el propio vicepresidente del ente, Diego Gómez, abogó por mantener contactos para concretar las ayudas del gobierno valenciano de forma que el aumento de la cuota se pueda rebajar hasta un 10 o un 12 %.
Por otra parte, la junta de gobierno aprobó ayer impulsar un nuevo servicio mancomunado de recogida de basuras. EU votó en contra al rechazar una gestión privatizada. Peláez comentó que se trata de un servicio nuevo y que para su puesta en marcha resulta imposible que lo asuma directamente la Mancomunitat por la inversión que requeriría.
