La Cooperativa Eléctrica de Alginet se ha convertido en un paradigma del cambio de rumbo del nuevo Consell. La visita del conseller de Economía Sostenible, Sectores Productivos, Comercio y Trabajo, Rafa Climent, ratificó el compromiso de la Generalitat Valenciana con este tipo de empresas, que recibirán el doble de ayudas que en los presupuestos formulados por el PP en los últimos años. «Nosotros, dentro de las posibilidades económicas que tenemos, vamos a estar a su lado, impulsándolo y en el presupuesto del 2016 hemos aumentado un 50% la partida para el cooperativismo y hemos pasado de 2,8 millones a cerca de 5 millones de euros», argumentó el conseller en su paseo por las instalaciones ribereñas, donde conoció la producción y características de la compañía. El Consell quiere premiar a las cooperativas por su modelo económico, en el que se reinvierte parte importante del beneficio en los trabajadores y su formación y en el bienestar de la sociedad. Así, en el plano social, el centro eléctrico de Alginet destina gran parte de sus beneficios a obra social, ofreciendo bonos de ayuda para la compra de material escolar, subvencionando asociaciones culturales y deportivas de la localidad y practicando descuentos en las facturas para socios y socias que estén jubilados, entre otras iniciativas.

Climent destacó «la importante labor de la Cooperativa Eléctrica de Alginet en la mejora de la calidad de vida del municipio y su sensibilidad ante el problema de la pobreza energética». Según el conseller «por desgracia, actualmente muchas familias de nuestro territorio son incapaces de asumir el coste de los suministros energéticos necesarios para cubrir sus necesidades básicas, entre las que se encuentran mantener la vivienda a una determinada temperatura mínima o poder disponer de agua caliente».

Bienestar y cohesión social

En este sentido, Climent alabó la actitud de la cooperativa eléctrica alginetina frente a la pobreza energética «porque está facilitando, a los hogares con dificultades económicas, hacer frente a la factura energética mediante acuerdos con las familias, plazos de pago más amplios y otras iniciativas encaminadas a evitar el corte del suministro». El conseller reafirmó que: «Las cosas se pueden hacer de otra forma, pensando en las personas y haciendo compatible beneficios económicos con el bienestar y la cohesión social».