Que los más pequeños conozcan la historia de su ciudad es una parte fundamental en su educación y crecimiento. En Cullera hay muchos vestigios de un pasado muy influyente. Leyendas e historias han pasado de padres a hijos y el ayuntamiento pretende que no se pierdan. El nuevo gobierno tiene entre sus objetivos revitalizar el histórico Barri del Pou. Entre las acciones que ha llevado a cabo para promocionar la antigua judería, las jornadas de historia para escolares que organiza la concejalía de Patrimonio están dirigidas este año a la promoción de este enclave de origen árabe entre los niños.

«Es importante no sólo que los turistas conozcan este barrio único en la Ribera y de los pocos que quedan en este estado de conservación en la provincia, sino que también nuestros niños se acerquen a él, conozcan su historia y lo valoren como parte de sus raíces», explica la edil Amparo Jover. En colaboración con el área de Educación estas jornadas se están desarrollando durante tres días con la participación de alumnos del CEIP Doctor Alemany y el CEIP Lluís Vives.