Los sindicatos representados en la Policía Local de Alzira mostraron ayer su sorpresa por la decisión de PSOE y EU de desmarcarse del resultado de la consulta realizada a la plantilla sobre el emplazamiento del nuevo retén y recordaron que, en las conversaciones previas a la votación, en las que participaron los tres grupos políticos que forman el gobierno, «quedó claro» que el resultado sería vinculante.
Los delegados recordaron que se preguntó expresamente por ese aspecto ya que consideraban que era un factor clave para fomentar la participación y los representantes del tripartito confirmaron que sí, sin que nadie dijera lo contrario. «Sólo esperamos que cumplan lo que asumieron», señalaron fuentes sindicales. Los diferentes delegados consultados coincidieron en mostrar su sorpresa por el comunicado emitido un día después de la votación por PSOE y EU, en el que exponen que no pueden apoyar una inversión para la construcción del retén que no pase por la recuperación de patrimonio, y reivindicaron que se cumpla el acuerdo del pleno por el que se establecían los pasos a seguir de forma que, una vez realizada la consulta a los trabajadores en caso de falta de acuerdo en el tripartito, «inmediatamente comenzara su ejecución». «Se han consumido todos los pasos y lo único que queda es la ejecución», apostilló un delegado, mientras incidía en que «todos asumieron que era vinculante».
Como ya informó Levante-EMV, la falta de acuerdo en el tripartito sobre el emplazamiento del futuro retén provocó que se convocara una consulta a la Policía Local. Compromís, grupo mayoritario en el gobierno, defendía la construcción de un retén de nueva planta en un solar que recae en la avenida Padre Pompilio, junto al barrio de l'Alquerieta, mientras que PSOE y EU abogaban por rehabilitar un ala del antiguo hospital Santa Lucía. La opción del nuevo edificio obtuvo el miércoles el respaldo de 58 agentes mientras que sólo dos votaron a favor de ubicar las nuevas dependencias policiales en el antiguo hospital municipal.
Lejos de asumir el resultado, los portavoces de PSOE y EU emitieron el jueves un comunicado en el que evidencian de nuevo el choque que este proyecto ha generado en el equipo de gobierno. Isabel Aguilar e Ivan Martínez reiteraban su apuesta por la rehabilitación de patrimonio frente a la construcción de nuevos edificios ya que consideran que esa segunda opción profundiza en el modelo de ciudad del PP y concluían señalando que «no podemos ni debemos apoyar una opción que contradice lo acordado y con lo que nos hemos comprometido ante el electorado». Aguilar y Martínez mostraban su convencimiento de que «aún hay margen para la negociación y para aportar soluciones si realmente hay voluntad».
El alcalde de Alzira, Diego Gómez (Compromís), emitía poco después un comunicado para dar cuenta del resultado de la votación y señalaba que, «con total respeto al acuerdo aprobado por el pleno, así como al resultado de la votación (?), sólo he de comunicar que se pondrán en marcha los mecanismos para poder llevar a cabo lo que se ha decidido».
Los delegados sindicales comentaron que en breve se reunirán para valorar la situación y definir una postura conjunta. Cabe señalar que la próxima semana la corporación celebrará el pleno ordinario de abril y no se descarta esperar a que, en el mismo, se dé cuenta de la votación realizada por la Policía Local de Alzira y se definan las posturas de cada grupo político.
