La primera asamblea consultiva de Fiestas convocada por el Ayuntamiento de Alzira con la idea de definir a través de la participación un nuevo modelo para las fiestas patronales de Sant Bernat sirvió para comprobar que existe cierta añoranza de aquellos grandes festivales musicales protagonizados por artistas de primer nivel, o incluso de épocas anteriores; que los barrios abogan por una descentralización; que pese a propiciar este debate este año volverán a programarse conciertos en el recinto ferial de Tulell y la plaza Mayor que ya están prácticamente cerrados, pero también sirvió para que el presidente de la Real Cofradía de la Murta, Juan Pellicer, esgrimiera un acta municipal por la que el ayuntamiento declaró en 1893 a la Virgen de la Murta patrona de la ciudad y reclamara igualdad de trato que a los otros otros dos copatronos, en este caso por resolución del Arzobispado, Sant Bernat y la Mare de Déu del Lluch.
La vicealcaldesa y concejal de Fiestas, Isabel Aguilar, reconoció que se trata de una propuesta que ya le había hecho llegar la asociación Amics de la Murta y se comprometió a estudiarla. Aguilar también respondió a una pregunta de la concejal del PP Chelo Martínez sobre el alcance de las decisiones que se pudieran tomar -quería saber si eran vinculantes- que al no haber una identificación previa de los asistentes no se produciría ninguna votación y que, en última instancia, se trataba de un foro para recoger opiniones aunque la potestad de decidir corresponde a la concejalía de Fiestas.
La asociación de vecinos de La Muntanyeta abrió la asamblea ofreciendo la amplia plaza de Cartonajes como un espacio idóneo para acoger algunas actividades en Sant Bernat y también de la AA VV de l'Alquerieta pidió una descentralización de actos pensando en la gente mayor que no se puede desplazar. Aguilar respondió que en Sant Bernat los espectáculos se tienen que centralizar en el recinto ferial y la plaza Mayor y dejó abierta la puerta para otras actividades que se programen a lo largo del año.
La edil defendió que, pese a la polémica generada cuando se aprobó el calendario laboral, las fiestas patronales no han perdido el nombre de Sant Bernat, y aplaudió las propuestas realizadas por el Consell de la Joventut centradas en la prevención de excesos. Jordi Palomares propuso gestionar actividades de concienciación sobre el alcohol a través del Controla Club, que se realicen controles de alcoholemia voluntarios antes de que un conductor arranque el coche al salir de las fiestas o que se distribuyan unas pulseras de colores para identificar a los menores de edad y controlar la venta de alcohol. También pidió unas fiestas con diversidad de estilos musicales.
EU planteó que se incorpore al programa un concurso de charangas o que se contemplen éstas como alternativa a discomóviles o orquestas y, en este punto, la edil confirmó que se está trabajando en una actividad así «no sabemos si concurso o festival», y también dejó claro que entre los espectáculos que el ayuntamiento tiene atados «habrá diversidad». Si bien dijo que era muy pronto para desvelar nombres, señaló que habrá grupos locales y también cantantes, si no de primera fila, de segunda.
Hubo asistentes que abogaron por programar conciertos importantes en Sant Bernat aunque sean de pago para que las fiestas vuelvan a ser un referente. Aguilar señaló que el presupuesto se ha reducido ligeramente hasta 179.000 euros, indicó que pretende demostrar que «con menos dinero se pueden hacer muchas cosas» y que la idea del nuevo gobierno es «recuperar no las mismas fiestas, pero sí que Alzira vuelva a ser un referente».
