Las más de cien viviendas que conforman las urbanizaciones de Sansofí y Montverd, ubicadas en la montaña de Llaurí, siguen sin tener una solución a corto plazo que les garantice la llegada de agua potable. La Asociación de Vecinos de Sansofí, que agrupa a 33 propietarios, indicó que, según ha informado recientemente el ayuntamiento, la empresa encargada del suministro de agua potable ve muy complicado ejecutar el proyecto para llevar agua potable hasta las urbanizaciones debido a su elevado coste. Y, pese a que son los propios vecinos los que tendrían que pagar estas obras, aún no les han detallado cuánto costaría construir una red de agua potable.
Los vecinos recordaron que esta mejora fue una promesa electoral; además, lamentaron que el consistorio se encuentra en una difícil situación económica y ello provoca que cada euro de inversión se destine al pago de deuda. Actualmente, una parte la urbanización de Montverd, con una cuarentena de viviendas y situada en la parte más baja de la ladera y catorce viviendas de Sansofí tienen un suministro de agua no potable por pozo de riego, mientras que unas 40 familias dependen de un manantial que en épocas de sequía prácticamente no da agua.
Los vecinos de esta zona también pagan el triple de tasa de basura (90 euros) que los residentes en el núcleo urbano (33 euros). Según indicaron, durante la campaña electoral les prometieron reducir este tributo, pero ahora el ayuntamiento les ha informado de que la tasa subida por el anterior consistorio no puede ser modificada por estar ligada a un aval bancario.
Otro problema que tienen estos vecinos es la falta de una red de alcantarillado. Los propietarios están a la espera de que el ayuntamiento les diga cuál es el sistema homologable que se prefiere y así los vecinos podrían ir realizando algunas de las actuaciones. Los residentes explicaron que están esperando que se apruebe un proyecto de urbanización que parece que tampoco verá la luz a corto plazo.
«El ayuntamiento está interesado en solucionar el problema», afirmaron, aunque a la vez lamentaron que «de todas estas medidas ninguna parece ir adelante y la situación parece estancada, de hecho, el tema del agua potable está completamente parado y sin expectativas de que a corto plazo se solucione». La Asociación de Vecinos de Sansofí reclama a las autoridades municipales, autonómicas y nacionales que agilicen los trámites para ordenar y legalizar la urbanización.
«Estamos en ello, pero es difícil»
Por su parte, la alcaldesa de Llaurí, Ana González, aclaró que no se está redactando un proyecto de urbanización porque, al estar ya construida la zona con viviendas, la conselleria indicó que sólo se puede dotar a este enclave de los servicios básicos. González indicó que los técnicos municipales están redactando un proyecto para que el alumbrado público y el agua potable lleguen a estas urbanizaciones.
Después presentarán este plan a la Unión Europea para optar a un programa de ayudas. González aseguró así que «estamos trabajando, pero no es una solución a corto plazo». Respecto a abastecer la zona con agua potable, insistió en que nunca se ha hablado de dar soluciones a corto plazo porque «técnicamente es muy complicado», ya que Sansofí está a gran altura y «las soluciones son caras», aunque dijo que no podía detallar lo que costaría el proyecto. Respecto a la tasa de la basura, el consistorio estudia la posibilidad de mancomunar la recogida para ahorrar costes.
