La existencia del puerto de la mítica ciudad romana de Sucro (Portum Sucrone) en el entorno de Cullera parece encontrar una nueva y clara evidencia. El ayuntamiento de la ciudad ha hecho público un extraordinario hallazgo arqueológico que apunta a la existencia de esta infraestructura en la bahía del municipio o bien en su entorno.

Un gladium o espada romana, un busto metálico partido, gran cantidad de restos de ánforas (bordes, cuellos, panzas, asas, pivotes), como mínimo 8 cepos (anclas romanas) y 2 de almirantazgo, lo que parecen ser tablones de madera descompuesta, piezas metálicas de difícil catalogación o material de construcción, entre otros restos, configuran parte del tesoro que alberga el fondo marino cullerense. Todos ellos parecen corresponder a la época clásica romana.

El descubrimiento lo hicieron por casualidad el pasado mes de diciembre los instructores de buceo cullerenses José Puig Olmo y Óscar Pellicer Alonso mientras estaban realizando una inmersión. Ambos observaron lo que parecían ser pequeños restos de ánforas, pero que dada la mala visibilidad de área (entre 10 y 30 cm) y el oleaje de mar de fondo, además del lodo subsistente de la pantanada de 1982, no pudieron concretar la zona ni el rumbo.

Desde aquella fecha los dos instructores del Centro de Buceo Delfín de Cullera intentaron volver a localizar la zona aplicando técnicas específicas subacuáticas de búsqueda y localización. Su objetivo era determinar si se trataba de restos de escasa entidad y aislados o de mayor envergadura. Durante más de 20 inmersiones 'de combate' -como se denomina a aquellas que se efectúan en duras condiciones- les resultó imposible volver a divisar los restos.