Los municipios de la comarca se ven obligados a emprender innovadoras políticas para paliar nuevos problemas, por ejemplo derivados del abandono agrícola por una crisis del sector que se alarga ya décadas. El Ayuntamiento de Llaurí, en su última sesión plenaria, aprobó por unanimidad las bases reguladoras del banco de tierras que a partir de ahora regirá parte del término municipal. La Concejalía de Agricultura había trabajado durante un tiempo para hacer realidad esta iniciativa con el claro objetivo de tratar de paliar el abandono de las parcelas rústicas e intentar dar solución a la creciente problemática ambiental y contaminante, derivada del abandono de los campos, como el incremento del riesgo e incendio, la proliferación de plagas, la erosión del suelo o la degradación paisajística.

Con la creación del banco de tierras se pretende incentivar a los propietarios de parcelas abandonadas o en riesgo de abandono para que se puedan cultivar por terceras personas.

Esta herramienta creada por el Ayuntamiento de Llaurí, siguiendo el modelo de la Diputación de Valencia, servirá para informar y facilitar el contacto entre propietarios de parcelas aptas para la explotación agrícola ubicadas en su término municipal y las personas interesadas en su cultivo. En el ayuntamiento están a disposición de los interesados los modelos de solicitud. Esta es una de las medidas propuestas y aprobadas desde la concejalía de Agricultura que ostenta Juan Morató, que junto con la puesta en marcha del Consejo Agrario Local pretenden dar un nuevo impulso a la agricultura local.