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La fauna de la zona quemada tardará al menos cuatro años en recuperarse

Los insectos y sus depredadores serán los primeros en regresar al monte de Carcaixent - Las aves buscan alimento en otros bosques

La fauna de la zona quemada tardará al menos cuatro años en recuperarse

Las más de 2.000 hectáreas de bosque que se quemaron en el incendio de Carcaixent prosiguen con su regeneración vegetal a un ritmo muy bueno. Sin embargo, la recuperación de la fauna será un poco más costosa. Los expertos aseguran que harán falta unos 4 o 5 años para que la zona vuelva a contar con una tamaño de población apreciable y que harán falta muchos años más para el bosque que se calcinó recupere las cifras de antes del incendio.

Este y otros temas se tratarán en las jornadas que acoge hoy Carcaixent organizadas por la Universidad de Valencia y el consistorio local bajo el título «Reptes i oportunitats després d'un incendi forestal». Sobre la repoblación de la fauna hablará el profesor de la UV y especialista en la ecología de la aves, el carcagentino Juan Monrós. El propio ponente asegura que «igual como en la flora primero van a regenerarse pequeñas plantas y matojos que son más resistentes al fuego, en la fauna primero se repoblarán los insectos, lo que atraerá a sus depredadores y estos a otros depredadores». Pese a ello, la tarea no es fácil, pues «prácticamente la totalidad de los reptiles desapareció al no tener medios para escapar del fuego», explica Monrós. Por el contrario, las aves sí que se marcharon cuando las llamas empezaron a quemar el bosque carcagentino. Sin embargo, «estas no volverán, de momento, al no tener cómo alimentarse aquí», añade el profesor de la UV. Algo similar sucede con los pájaros que regresan del norte de Europa para invernar. «Llegarán y se encontrarán con un bosque quemado y sin recursos para alimentarse, por lo que se marcharán a otros sitios». Algunos ejemplares como el búho real o el águila perdicera tardarán años en regresar ante la falta de animales que cazar.

Regeneración natural

Monrós señala que «hay que dejar que la naturaleza, que es sabia, regenere la zona y solo actuar en caso de que sea necesario». El profesor aboga por realizar labores de control y por dejar en el monte los árboles que fueron calcinados. «Estos árboles suelen atraer a los insectos para alimentarse y reproducirse, con lo que se regeneraría el primer escalón de la fauna y podría atraer a reptiles, roedores o especies insectívoras que con el incendio prácticamente desaparecieron del monte carcagentino», asegura. La recuperación de la fauna también puede atraer de nuevo a los jabalíes que, tras la calcinación del monte, rondan los campos de cultivos de Carcaixent y la Barraca de Aigües Vives en busca de sustento y de agua.

La reunión de hoy servirá también para buscar voluntarios que se impliquen en un proyecto de investigación que controle la evolución de la fauna y la flora en Carcaixent. «La idea es evaluar cual es la velocidad de recuperación del monte y confirmar si ya existe algún tipo de restablecimiento de la fauna».

Además de la ponencia de Monrós, la jornada se completará con tres charlas más a lo largo de la mañana, una mesa redonda por la tarde y la posterior visita al Hort de Soriano.

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