Alzira fue unos de los emplazamientos preferidos por el rey Jaume I tras la reconquista. El monarca visitó en notables ocasiones la ciudad, donde pasó grandes estancias en la Casa del Rei, también conocida como Casa de l'Olivera. La influencia del conquistador se puede ver en los numerosos vestigios de la época que todavía perduran en Alzira, pero también en los monumentos y actos que la ciudad realizó en homenaje al monarca. Ahora, sin embargo, la huella de Jaume I está más presente que nunca, pues la reciente puesta en marcha del Centre Bibliogràfic Jaume I en el archivo municipal de Alzira y la celebración de la primera edición de les Jornades Jaume I han vuelto a poner en valor la relación entre el rey y la capital de la Ribera.
La intención que se tiene, sobre todo desde el consistorio local, es la de «dar a conocer la figura de Jaume I y su vinculación a Alzira», según apunta el historiador y cronista de Alzira, Aureliano Lairón. Para ello, pretenden involucrar a los colegios para que los alumnos alcireños asistan al centro bibliográfico sobre el monarca, el cual podrá visitarse a partir de la semana que viene, y conocer su figura y legado. «Entre los diferentes documentos que hay en el archivo, Alzira cuenta con tres pergaminos del siglo XIII, además de con el Aureum Opus (un códice miniado de finales del siglo XIV que recoge los privilegios concedidos tanto a Alzira como al antiguo Reino de Valencia), y ahora con una serie de libros sobre la obra y vida de Jaume I adquiridos gracias a una ayuda de la Acadèmia Valenciana de la Llengua», explica Lairón. En este aspecto, el archivo municipal también está abierto a recopilar libros o documentos sobre el monarca que cualquier vecino quiera donar, con la intención de convertirse en un verdadero punto de referencia para investigadores. En el caso de los escolares, por su parte, también se programan visitas guiadas y se proyecta un documental para ayudar a la divulgación de la figura del monarca. Precisamente, el cronista alcireño presentó el pasado martes el libro «Jaume. Les peripècies d'un rei valent», una adaptación de la vida del Conqueridor para niños con imágenes de la alcudiana Lídia Boix y editado por Reclam Editorial, que pretende poner en valor la historia del rey.
Otra de las acciones que persigue impulsar el conocimiento de la relación que Jaume I tuvo con Alzira es la organización de las jornadas sobre la figura del monarca y su legado, que finalizaron ayer y que se celebrarán a partir de ahora de forma anual y alternativamente entre la capital de la Ribera y Villarreal, otro municipio de gran consideración para el monarca. No obstante, el propio rey fundó la ciudad. En la conferencia participaron una decena de historiadores y expertos, entre ellos el doctor Vicente García Edo, el profesor Ramón Ferrer o Antoni Furió.
La ruta sobre el monarca
Las jornadas sirvieron también para poner en valor la Ruta Jaume I, un itinerario que recorrerá diferentes enclaves de la Ribera vinculados al monarca y que fue presentado por Joan Josep Pons. En este aspecto, destaca que Alzira no posea un recorrido propio por los numerosos emplazamientos que recuerdan la gran vinculación del Conqueridor con la ciudad. «Sí que se han realizado algunas rutas, aunque de forma ocasional», explica Lairón. En este aspecto, además de los restos de la Casa del Rei, se puede encontrar en el municipio los restos del templo de Santa María, probablemente la primera iglesia alcireña de culto cristiano, los vestigios del templo de Sant Agustí, la antigua iglesia conventual, o la Pileta del Martiri dels Sants Patrons, que rememora la presencia del monarca. Por otro lado, el Retaule de Sant Silvestre del artista Vicente Requena, que se encuentra en la casa consistorial, y la cruz cubierta, situada en el camino hacia Valencia (ahora autovía en dirección a Algemesí) son otros de los elementos que recuerdan al soberano, sin olvidar las murallas, testigo de la entrada del Conqueridor en Alzira.
Además de estos emplazamientos, el monarca también da nombre a un instituto y a una calle, mientras que en las plazas Sant Judes Tadeu y Constitución existen monumentos en su honor. Alzira por último, celebra cada 30 de diciembre el aniversario de la conquista de la ciudad con una procesión cívica y la entrega de insignias a personas o empresas del municipio alcireño.
