El Inter Alzira B (que une a jugadores de la capital de la Ribera y de Cullera) estará en las semifinales. El conjunto ribereño viajaba a Teruel con una ventaja de diecisiete puntos del partido de ida (27-10) y sucumbieron en el último minuto ante un conjunto local que recurrió a la épica para ganar el menos el encuentro, que no la eliminatoria.
Pese a la ventaja del encuentro de ida, el Inter entró en el partido dispuesto a tomar la manija y no dejarse sorprender y lo consiguió, dominando desde el inicio y jugando muchos minutos en la zona de veintidós de los locales.
Lograron el primer ensayo a los diez minutos y el segundo a los veintidós. Los turolenses solo consiguieron llegar a la línea de diez metros interista, desde donde consiguieron transformar un golpe de castigo, en el minuto 34 para poner el resultado 3-10 con el que se llegaría al descanso.
Después del plácido primer tiempo, el segundo no podía empezar mejor, consiguiendo el tercer ensayo a los tres minutos. Incomprensiblemente, desde ahí el juego interista cayó en picado, cometiendo errores que únicamente pueden ser achacados a la inexperiencia.
Con todo a favor y con la tranquilidad que ofrecía el colchón del partido de ida, se dejaron ganar un encuentro cuyo marcador dominaron hasta el último minuto pese al mal juego. Los «toros» de Teruel recurrieron a la épica, consiguiendo ganar el partido en el último minuto, celebrando la victoria con gran alborozo al acabar la contienda.
El jugador del partido fue sin duda el cullerense Javier Grau, todo un derroche de fuerza y oficio. Este supone un éxito más del club de Alzira y Cullera que se ha configurado para ofrecer estabilidad al rugby de las dos localidades. A la buena marcha del primera conjunto se une una inesperada clasificación del filial.
