El hasta ahora coordinador del Aula Didáctica de Cultura Contemporánea del Espai Fuster, Salvador Ortells, se encargará de dirigir el complejo cultural instalado en la casa donde vivió el escritor suecano. Ortells sustituye en el cargo al hasta ahora director Francesc Pérez Moragón, quien deja su puesto al no poder compaginar sus labores con la mayor implicación que exige el espacio tras la reciente inauguración del museo sobre la figura de Joan Fuster. No obstante, el intelectual y experto en la vida de Fuster ostentará el cargo de presidente de honor y realizará las funciones que desarrollaba antes de ser nombrado director, como asesor extraordinario del complejo.
La elección del suecano Ortells y la designación de presidente de honor de Pérez Moragón se consumaron por unanimidad en el último pleno celebrado por la corporación municipal. El nuevo presidente coordinaba hasta el momento el aula didáctica mediante una comisión de servicios de la Generalitat. Entre otros cometidos, se encarcagaba de las actividades culturales y, una vez inaugurado el museo, de los talleres didácticos. De hecho, con la externalización de la gestión del museo, que se realizó al no poderse crear más plazas de funcionario, se ha procedido a la incorporación de los puestos de guía, monitor y conserje, lo que ha permitido que se empiecen a organizar este tipo de talleres elaborados por el propio Ortells. «Ahora los escolares pueden hacer una visita al museo y complementar la misma trabajando con aspectos parciales de la vida de Fuster», señala el nuevo director. Además de estas labores, la dirección permitirá al nuevo máximo dirigente del complejo cultural coordinar también el museo y el centro documental.
Agradecido a su antecesor
Sobre Pérez Moragón, Ortells solo tiene que buenas palabras. «Lo admiro como intelectual y por todo el trabajo realizado en el Espai Fuster». El suecano, además, aseguró que «mientras yo esté como director será una parte activa y decisiva en la directrices que se establezcan, así como en la organización de exposiciones y otras iniciativas a llevar a cabo».
Por su parte, el ya exdirector confirmó que «la actual situación del museo requería de una implicación mayor que yo no podía asumir» y agradeció al gobierno suecano que le haya nombrado director de honor. El intelectual, además, aprovechó para anunciar que «hay prevista una futura reunión con la conselleria para abordar temas de colaboración más ambiciosos que la cooperación que existe en la actualidad entre el Espai Fuster y el ente autonómico».
