Los veleros del Club Náutico de Cullera obtuvieron muy buenos resultados en la regata de altura la Ruta de la Sal. Esta mítica prueba se disputa entre Dénia e Ibiza aunque también cuenta con una versión que sale desde Barcelona y otra desde Mallorca.

El Slainte, de los hermanos Marcos y Alejandro Grau, quedó 5º de la clasificación general y 3º en la clase Alfa 3, una categoría que agrupa a embarcaciones de muy alto nivel.

Por su parte el Saladar, capitaneado por Alejandro Ramos e integrado por miembros de la Escuela Náutica Cabo Mayor de Santander, quedó 13º en la clasificación general, 1º de la clase Training de barcos escuela y 4º de la clase Alfa 2.

El Llevant Blau Regata, capitaneado por Pepe Vives, quedó en en 19º posición en la general; 4º en la clase Bravo y 3º en la clase Training de barcos escuela.

Este año la Ruta de la Sal fue especialmente complicada. Un aviso de temporal de fuerza siete en el norte de Ibiza retiró a gran parte de la flota y a otros tanto les dejó parte del velamen del barco roto. Las fuertes rachas de viento y la mala mar fueron las protagonistas y ello provocó que un gran número de embarcaciones decidieran retirarse. Mientras que las tripulaciones que se quedaron hasta el final tuvieron que armarse de pericia para hacer frente a esta dura prueba. «Fue la Ruta de la Sal más dura de todas en las que hemos competido», aseguraron los integrantes de la tripulación del Slainte.