La declaración de las populares danzas de Guadassuar como Bien de Interés Cultural Inmaterial,Bien de Interés Cultural Inmaterial una antigua aspiración de todo un pueblo que se plasmó hace seis años con la presentación por parte de la Associació Amics de les Danses de un segundo expediente que justificaba los valores de esta manifestación festiva, está más cerca. La Conselleria de Cultura ha iniciado el expediente para otorgar a las danzas el reconocimiento de BIC, según la resolución publicada ayer en el Diari Oficial de la Comunitat Valenciana, que establece unas normas de salvaguarda y protección para conservar su esencia. La propuesta encarga a la asociación que formalizó la solicitud y al ayuntamiento la gestión de este bien inmaterial.

Todos los vecinos de Guadassuar tienen marcada en su agenda la última semana completa de agosto cuando, durante seis noches consecutivas, de lunes a sábado, cada día en una calle diferente, se celebran les Danses. Se trata de una manifestación festiva que se enmarca en las llamadas «danses de carrer» características de muchas comarcas valencianas que, no obstante, cuenta con unos rasgos diferenciadores que la hacen acreedora de su declaración como BIC.

Si bien su origen se pierde en el tiempo -una leyenda con apariencia histórica lo vincula con la conquista de la población por parte de Jaume I al relatar que las doncellas musulmanas recibieron a los soldados y al rey con danzas y otras fiestas-, entre esas particularidades destaca que las danzas «nunca han dejado de celebrarse» y «han conservado el hilo, adaptándose en el tiempo a necesidades, modas y costumbres» por lo que son un «hecho vivo»; se trata de una participación abierta a todo el que lo desee ya que cualquier vecino puede incorporarse hasta el momento en que comienzan y no se baila con vestidos folklóricos, sino «con lo primero que se encuentra». «No se concibe como un carnaval en los que las personas se disfrazan, sino como una vestimenta que se pone para bailar».

Por otra parte, los expertos han constatado que conserva una música propia interpretada por instrumentos de banda al unísono con el solo acompañamiento del ritmo de la caja y constan de un ritual fijo e invariable formado por el «Passacarrer», la «Eixida», el «cap de Dansa», la «Dansà» y el «Danseret». «El ritual marca todas las fase de la fiesta y es respetado», subraya la resolución de la conselleria, que expone que esta manifestación «no se ha fosilizado» y, además, ha servido de modelo para la recuperación de las danzas en otros municipios.

Todo el pueblo implicado

En la práctica, les Danses de Guadassuar movilizan a todo un pueblo. Unos bailan uno o varios días, otros engalanan la calle en la que se celebra esa noche la «dansà», otros colaboran en la confección de la indumentaria y el resto simplemente acude cada noche a presenciar como público el espectáculo, sin olvidar a los festeros. El carácter «participativo, espontáneo y popular» es una de las peculiaridades más notables de les Danses. Se baila el «pas pla». Para ser bailador sólo hace falta reproducir los movimientos correspondientes al ritmo de la música de forma repetida y los vecinos de Guadassuar identifican rápidamente a los que no son del pueblo por su forma de marcar los pasos y movimientos. La Setmana de Danses está declarada desde 1985 Fiesta de Interés Turístico Nacional.