El acuerdo que adoptó la corporación el 31 de marzo de 1964 había pasado desapercibido para sucesivas corporaciones hasta que un vecino alertó a la actual coalición de izquierdas de que los honores que el Ayuntamiento de Villanueva de Castellón concedió al dictador Francisco Franco siguen vigentes. Localizada el acta que confirma el acuerdo, el equipo de gobierno ha elevado una propuesta para retirar la medalla de oro de la ciudad con que aquel ayuntamiento afecto al régimen distinguió al dictador. El pleno que revocará estos honores se celebrará mañana viernes a las 22 horas. En la misma sesión, el tripartito formado por Gent de Castelló-Compromís, Esquerra Unida y PSPV tiene previsto acordar la instalación de una placa conmemorativa en el cementerio para que cada 28 de marzo, día de recuerdo y homenaje a las víctimas de la Guerra Civil y la dictadura -una conmemoración que ha establecido la Ley de Memoria Democrática y por la Convivencia en la Comunitat Valenciana- se pueda reivindicar su memoria.
La concesión de la medalla de oro de Villanueva de Castellón al general Franco se produjo, según relata el acta del pleno con la pomposidad del lenguaje de la época, en conmemoración del 25 aniversario del fin de la Guerra Civil, que la propuesta del entonces alcalde presenta como «25 años de paz en España», un argumento que ha causado si cabe mayor sorpresa entre los integrantes del actual gobierno de Villanueva de Castellón.
La transcripción del acta revela que se trataba de la primer medalla de oro que concedía el ayuntamiento después de que «la superioridad» hubiera aprobado el reglamento especial de honores y distinciones y se concedía al dictador «teniendo en cuenta los especiales merecimientos que concurren y extraordinarios servicios prestados a la Patria y como salvador de la misma, en conmemoración del 25 aniversario de Paz en España», reza el texto, que fue aprobado por «aclamación» de los ediles que entonces integraban la corporación municipal.
Fuentes municipales comentaron que, al parecer, la concesión de estas distinciones fue una directriz que impuso el régimen a todos los ayuntamientos coincidiendo con el aniversario del fin de la guerra, por lo que no fue algo exclusivo de Villanueva de Castellón, un municipio con larga tradición de gobiernos de izquierdas donde, al parecer, esta medalla de oro había pasado desapercibida hasta que un vecino recordó el acuerdo adoptado en plena dictadura, que ha estado vigente durante 54 años.
La nueva corporación tiene previsto revocar esta distinción mañana mismo en cumplimiento de la Ley de Memoria Histórica y, al mismo tiempo, recogiendo el mandato de la ley autonómica de Memoria Democrática que insta a las instituciones públicas a impulsar cada 28 de marzo «actos de reconocimiento y homenaje» a las víctimas de la Guerra Civil y la dictadura, acordará la instalación de una placa conmemorativa en el cementerio municipal.
