El Ayuntamiento de Villalonga no devolverá, de momento, los 125.000 euros del aval depositado por la empresa Cyca, que llevó a cabo las obras de peatonalización de las calles y plazas del centro de esta localidad, un proyecto que se ejecutó hace de cinco años.

El motivo es el mal estado que presentan algunos de estos viales, con pavimento suelto o roto debido, fundamentalmente, al paso de vehículos y a la pérdida de parte del material que se inyectó en las juntas de las baldosas.

La propuesta de devolver el aval de 125.000 euros y dar por zanjado este proyecto que impulsó el exalcalde del PP, Juan Ros, partió del actual alcalde socialista, Enric Llorca, pero la crisis interna desatada en el seno de su grupo político municipal le impidió aprobar esa decisión.

En contra de la devolución del aval votaron los tres concejales del PP, los dos de Compromís y las concejalas socialista Alicia Gomis y Lidia Reig. Estas dos últimas le retiraron la confianza al alcalde en la primera sesión corporativa, y desde entonces Enric Llorca se ha quedado en minoría en los plenos, con cuatro votos, el suyo propio y el de los tres concejales que del PSPV le respaldan.

Según señalaron las concejalas Gomis y Reig, su voto en contra de devolver el aval a la empresa Cyca se mantendrá «hasta la reparación de los importantes desperfectos existentes» en las calles, y recriminaron que el alcalde convocara este pleno de forma urgente sin que, según señalan, se les diera tiempo para estudiar la documentación. Gomis y Reig también reprocharon que el alcalde no hubiese obligado antes a la empresa constructora a reparar los desperfectos detectados.

En respuesta a estas declaraciones, el alcalde, Enric Llorca, advirtió ayer que la devolución del aval de 125.000 euros a Cyca debía llevarse a cabo porque así lo señalaban dos informes, uno firmado por el técnico municipal y otro por la secretaria de la corporación, de manera que advirtió de posibles responsabilidades para los concejales que, con su voto, impedirán cumplir con lo que, en su opinión, es una obligación del ayuntamiento.

Además, Llorca aseguró que ya habló con los responsables de Cyca y que la empresa se ha comprometido a llevar a cabo durante este mes de septiembre el arreglo de las zonas más deterioradas.

Los desperfectos que sufren estas calles peatonalizadas se debe al arrastre de la arena colocada entre las baldosas y al paso de coches y camionetas que provocan la rotura de estos elementos.