La paralización indefinida del proyecto para ubicar una planta de tratamiento de basura en Llanera de Ranes (cerca de Xàtiva), que habría dado servicio a la Safor, la Vall d'Albaida, la Costera, la Canal de Navarrés y el Valle de Ayora ha situado al Consorcio de Residuos de estas cinco comarcas (COR) a la casilla de salida.
El presidente del organismo y alcalde de Xàtiva, Roger Cerdà, se ha dirigido por carta a los 91 alcaldes que integran el área de gestión, entre ellos los de la Safor excepto Barx y la Valldigna, para emplazarles a que propongan lugares en sus municipios susceptibles de albergar las plantas de tratamiento, transferencia y eliminación de la basura.
El COR ha abierto un proceso «participativo y transparente» para definir el nuevo esquema de gestión de los residuos, después de que las críticas de los ayuntamientos por la falta de debate obligaran a los máximos responsables del ente a retirar la propuesta que abogaba por ubicar en Zarra (el Valle de Ayora) el vertedero de las cinco comarcas y por construir dos nuevas plantas de de tratamiento, en Bufali (la Vall d'Albaida) y Ròtova (la Safor).
Los alcaldes que quieran acoger en sus términos cualquiera de los tres tipos de instalaciones tienen como fecha el 16 de mayo para entregar un formulario en el que los ayuntamientos han de indicar las características de los terrenos que propugnan, especificando la propiedad, la disponibilidad, si es urbanizable o no o si están sometidos a algún nivel de protección. También si la propuesta es para acoger una planta transferencia, de tratamiento o vertedero.
El COR constituirá una comisión técnica que evaluará las diferentes proposiciones recopiladas y elevará su dictamen a la asamblea, una vez se haya logrado «el máximo consenso» entre los alcaldes. Antes de proceder a modificar el Plan de Gestión de Residuos, el gobierno del COR reunirá a los representantes de los 91 municipios para abordar en profundidad las posibles opciones, sus puntos a favor y en contra.
Además de los aspectos técnicos, el COR señala que se tendrá muy en cuenta «la conflictividad social» que pueda despertar cada ubicación. La intención de los responsables del consorcio es que el proceso no se demore demasiado, de modo que, a lo largo del próximo verano, pueda cristalizar un nuevo mapa de instalaciones que no genere ni el rechazo de instituciones, entre ellos los ayuntamiento, o de los ciudadanos. En el COR, sin embargo, reconocen que, con las propuestas de los alcaldes, puede que se desencadenen polémicas, especialmente en la Safor, donde situar una instalación lejos de los cascos urbanos y en suelo que no esté protegido por su valor ambiental es muy difícil.
La carta, firmada por el presidente del COR y por el director de Calidad Ambiental de la Generalitat, Joan Piquer, ha causado sorpresa entre muchos alcaldes por lo que supone comenzar de cero las gestiones para disponer de un plan de tratamiento y eliminación de las basuras.
«Todo está abierto»
Aunque el esquema inicial negociado por el COR tras las elecciones municipales proponía un solo vertedero para las cinco comarcas en Zarra, en el ente admiten que ahora «todo está abierto». El secretario autonómico de Medio Ambiente, Julià Àlvaro, ha rechazado «la vía de Zarra» y apuesta porque la Vall d'Albaida disponga de una planta de tratamiento exclusiva la comarca, lo que supone cambiar todo el diseño que el COR ha realizado durante diez años.
