Desde el pasado 1 de diciembre, la estación de ferrocarriles suizos de Stadelhofen en Zúrich, conocida por ser el primer gran proyecto de Santiago Calatrava, se ha visto enriquecida con una nueva pieza arquitectónica de la pluma del arquitecto e ingeniero español. Para dar un valor añadido al nuevo paso hacia la estación, se ha construido un pequeño kiosko exento que será ocupado por una empresa suiza de catering.

“Es un proyecto relativamente pequeño pero lo he realizado para los ferrocarriles suizos con gran ilusión”, declaró Santiago Calatrava. “La estación de Stadelhofen no es sólo un punto clave en la red de transporte público suiza, también lo es para mí a nivel personal, puesto que su diseño y construcción fue de enorme relevancia en mi trayectoria y lo que aprendí acerca de estaciones en este proyecto supuso la base para posteriores proyectos de estaciones en Bélgica, Francia, España, Portugal, Italia y Estados Unidos”.

La idea de construir este kiosko vino de los ferrocarriles suizos que buscaban dar mayor permeabilidad a la estación creando un nuevo acceso directo desde una calle anexa. La pieza resultante es una estructura exenta del edificio de la estación y orientada a la plataforma nº 1 permitiendo un flujo óptimo de viajeros gracias a su planta redondeada.

Sus detalles, la construcción en acero de color antracita, junto con su superficie de vidrio, logran que este elemento se integre a la perfección en el conjunto de la estación de Stadelhofen, creando una unidad arquitectónica.

La estación recibirá aún más mejoras con la planificación de un edificio de uso comercial y de oficinas en el que Santiago Calatrava está trabajando actualmente y que incluirá un aparcamiento para 1.000 bicicletas conectado directamente a la estación.

La estación de ferrocarriles de Stadelhofen figura en el Inventario Suizo de Patrimonio Cultural de Importancia Nacional y Regional. La construcción del nuevo elemento se ha realizado en coordinación con la Oficina de Patrimonio.