La Guardia Civil y Vigilancia Aduanera han confiscado otros 148 kilos de cocaína en el puerto de Valencia, que llegaron en forma de "gancho perdido", utilizando un envío comercial de miel pura de abejas envasada en Chile y legalmente importada por una empresa de la Comunitat Valenciana. La droga, oculta dentro de seis bolsas grandes de viaje, fue confiscada el pasado día 15, cuando los agentes abrieron el contenedor al enviarlo a revisión tras sospechar que pudiera transportar droga.

Todo apunta a que los bolsones con las 148 pastillas de cocaína fueron cargadas durante el transbordo de la carga realizado en Panamá, uno de los puertos calientes en los que los narcos colombianos disponen de colaboradores que se encargan de violentar los precintos originales, meter la droga y un precinto de repuesto antes de que prosiga viaje hacia España.

Casi una tonelada en 2012

Ambos cuerpos informaron ayer de que en 2012 se incautaron de 965 kilos de cocaína en el puerto de Valencia, casi el doble que en 2011, cuando fueron aprehendidos 552 kilos dentro de los muelles valencianos.

Por otro lado, el Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga (EDOA) de la Guardia Civil de Valencia detuvo el pasado martes al octavo presunto integrante de la banda desmantelada en septiembre pasado en la "Operación Basila" y en la que estaban supuestamente implicados un santero de Gandia y una estibadora del puerto de Valencia. El último arrestado es J.C.B.P., de 49 años, a quien se supone responsable del quinto "gancho perdido" atribuido a este grupo: 99 kilos de cocaína confiscados en diciembre pasado en el puerto de Valencia, tal como adelantó Levante-EMV.