Los dos ladrones que se colaron en la farmacia del Hospital La Fe de Valencia el pasado sábado para robar gran cantidad de hormonas de crecimiento sustrajeron cerca de 70.000 euros en fármacos, según fuentes policiales. Además, los medicamentos robados podrían ser vendidos en el mercado negro como anabolizantes por un valor que ronda los 200.000 euros, según apuntaron las fuentes consultadas por este periódico.

El robo, del que informó ayer en exclusiva Levante-EMV, se produjo el sábado al mediodía aprovechando la carencia de vigilantes y personal sanitario a esa hora. Así lo considera el secretario de la Federación de Trabajadores de Seguridad Privada de USO, quien atribuye lo ocurrido a los recortes en materia de seguridad que se llevan produciendo en los últimos años. De hecho desde que se abrió el nuevo centro hospitalario en 2011 el número de vigilantes se ha reducido a la mitad. «Los fines de semana apenas hay entre siete y ocho vigilantes para controlar todo el hospital, incluyendo los del centro de control y las rondas», criticó Juan Fresneda. Asimismo, el responsable de Seguridad Privada de USO cuestionó la utilidad de las más de 900 cámaras de seguridad que hay en el hospital. «Es imposible que un solo vigilante controle todas las pantallas a la vez. Son prácticas para visionar a posteriori si ha ocurrido algo pero no como elemento de control a tiempo real», puntualizó.

Para evitar robos como el ocurrido en el almacén de productos farmacológicos de La Fe el pasado sábado, donde dos hombres con sendos cascos irrumpieron sin que nadie se percatara de su presencia, Fresneda insta a que un profesional determine el número de vigilantes idóneo por centro.