Detenido un empresario por grabar a sus empleadas con una cámara espía en el baño

La Policía Nacional le requisó abundante material pedófilo y varias decenas de vídeos producidos por él a partir de la captación de las imágenes obtenidas con una cámara bolígrafo

El acusado, que no tiene antecedentes, ha quedado en libertad con medidas cautelares

Imagen de archivo de un policía nacional examinando imágenes de pornografía infantil.

Imagen de archivo de un policía nacional examinando imágenes de pornografía infantil. / Policía Nacional

Teresa Domínguez

Teresa Domínguez

Llevaba meses compartiendo pornografía infantil a través de internet y, además, grabando a sus empleadas cuando iban al baño tras colocar una cámara espía dentro del aseo, camuflada en la parte alta de la estancia para alejarla de la vista de sus víctimas. Ahora, la Policía Nacional ha puesto coto a sus acciones, tras detenerlo esta misma semana y ponerlo a disposición del juzgado de guardia de Torrent, que lo ha dejado en libertad, aunque con medidas cautelares.

Los hechos, de los que ha tenido conocimiento Levante-EMV a través de fuentes de toda solvencia, llevaban produciéndose hace al menos un año y han sido destapados gracias a una información enviada desde Estados Unidos por Icaccops (las siglas de Internet Crimes Against Children Child On-line Protection System, esto es, el servicio de protección en línea de los crímenes en internet contra la Infancia). 

Alerta en las redes P2P

Se trata de una herramienta utilizada para verificar y seguir el tráfico de material de explotación sexual de niños, niñas y adolescentes en plataformas de intercambio peer to peer (P2P), principalmente Emule o Ares, antiguos programas utilizados para la descarga de música o de películas que siguen en uso para este tipo de delitos y otros similares.

Las alertas lanzadas por Icaccops son la manera más habitual de cazar a este tipo de delincuente sexual, que cada vez pasa más de la mera descarga y distribución a la producción de material que después ponen en circulación usando esas mismas redes P2P.

En ocasiones, obtienen imágenes de contenido sexual explícito con menores utilizando tácticas de grooming -haciéndose pasar por alguien de la misma edad que la víctima para lo cual falsean su perfil y su foto para generar confianza- o bien saliendo a la calle y captando menores a quienes luego llevan a su casa bajo engaño hasta lograr someterlos a abusos sexuales que graban y difunden, obteniendo además un importante beneficio económico con ello.

La Policía rastreará los vídeos

De momento, al menos según la información que manejan en este momento el juzgado y la Fiscalía, no sería el caso del último detenido por este hecho. Sin embargo, lo más probable es que el Juzgado de Instrucción número 1 de Torrent, que es quien ha estado supervisando el caso, ordene al grupo de Delitos Tecnológicos de la Jefatura Superior de Policía de València, cuyos agentes han resuelto este caso, que rastreen las cerca de 25 grabaciones realizadas con la cámara oculta para ver si el arrestado, español, soltero, de 46 años y que vivía con sus padres, ha compartido esos vídeos a través de internet.

En el caso de este pedófilo, del que este diario no revela ni la identidad ni el municipio donde actuaba para preservar el anonimato y la intimidad de sus víctimas, los agentes especializados en ciberdelincuencia pudieron rastrearle gracias a la alerta de Icaccops, que situaba en València una de las direcciones IP desde las que alguien se había descargado y compartido uno de los miles de vídeos de abuso sexual infantil que ya están catalogados por agencias de todo el mundo a través de su hash, algo así, para entendernos, como una especie de ADN que hace cada archivo único en el mundo.

Los videos inesperados

Tras una laboriosa investigación de más de diez meses, los ciberagentes localizaron por fin el domicilio del sospechoso, en una población de l’Horta, y lo detuvieron. A partir de ahí, solicitaron al juzgado registros en la casa, pero también en las empresas de las que era socio, todas ellas relacionadas con la informática, tanto en el ámbito de la provisión de servicios, como de la enseñanza.

Al revisar los archivos que tenía descargados, tanto en su casa como en el trabajo, vieron los vídeos que acreditaban que había estado grabando a escondidas a sus empleadas en los aseos femeninos de la oficina. Tras observar el ángulo de grabación, fueron al cuarto de baño y, efectivamente, encontraron la cámara, escondida dentro de un bolígrafo, adosada a la pared y camuflada.

El viernes, fue puesto a disposición del juzgado de guardia de Torrent, que decretó libertad provisional con medidas cautelares.