Un hombre de 59 años fue condenado ayer en Zaragoza a 22 años de cárcel por el asesinato de su pareja, Mercedes Pérez, de 41, a la que mató en abril de 2013 a golpes de martillo y posteriormente descuartizó y guardó en un arcón frigorífico. Una discusión por motivos económicos desencadenó, al parecer, el ataque de Vicente Sada Gómez contra su pareja.

Con el martillo que la mujer estaba utilizando para partir almendras le asestó varios golpes, provocándole la muerte. Tras varios días con el cadáver en casa, los vecinos se extrañaron por el olor, por lo que el asesino colocó el cuerpo en la bañera con hielos hasta que se hizo con una arcón frigorífico. Para meter el cuerpo, lo descuartizó, aunque las piernas las lanzó al rio Huerva. Tras un intento de suicidio en un hotel cántabro, se localizaron notas donde confesaba el crimen.