El joven que murió ahogado mientras practicaba pesca submarina en la cala de Ambolo de Xàbia quedó atrapado, a unos cuatro metros de profundidad, en una cueva que se abre en la pared sumergida de la Illa del Descobridor.
Los especialistas del GEAS (Grupo de Actividades Subacuáticas) de la Guardia Civil hallaron el cadáver, como ya adelantó ayer Levante-EMV, cuando ya era de noche y se había retirado el helicóptero de Salvamento Marítimo.
El mar estaba en calma y había buena visibilidad. Encontraron el cuerpo en una última inmersión, cuando ya estaban a punto de suspender la búsqueda. Durante la tarde habían localizado la boya de señalización flotando a siete metros de donde luego apareció el buceador muerto.
El submarinista fallecido es Guillem Martí, de 19 años y natural de Valencia, donde estudiaba en la Universitat Politècnica. Antes había cursado estudios en el colegio de El Pilar.
También jugaba al rugby en el equipo Estudiantes RC. Su otro deporte era el buceo. Cuando podía realizaba una escapada y Xàbia, que destaca por sus fondos marinos, era uno de sus lugares preferidos realizar inmersiones.
El miércoles llegó junto a otro amigo buceador a Ambolo sobre las 11.00 horas. Ambos realizaban inmersiones en apnea (a pulmón). Su compañero lo vio por última vez a las 14.00 horas. Luego le perdió el rastro y empezó a inquietarse. A las 16.30 horas, pidió ayuda. Una patrulla de la Guardia Civil que estaba en la zona del Cap de la Nau llegó en seguida. La policía local también participó en una búsqueda para la que se movilizaron a la embarcación y el helicóptero de Salvamento Marítimo.
Mientras se llevaba a cabo la búsqueda, acudieron a Ambolo otros amigos de la víctima, un gran amante de los deportes al aire libre. Cuando los submarinistas de la Guardia Civil hallaron el cadáver, quedaron destrozados. Pasadas las 23.00 horas, una embarcación llegaba al puerto de Xàbia con el cuerpo sin vida del joven buceador.
