La Policía Nacional ha detenido a una mujer de 45 años acusada de intento de homicidio después de apuñalar mientras dormía a su inquilino, tras lo cual prendió fuego a la casa con la intención de quitarle la vida. Al parecer, la mujer sufre algún tipo de trastorno mental y el día de los hechos, el martes de la semana pasada, había consumido alcohol, según han ratificado algunos testigos en su declaración ante el juez.

De hecho, una de las testigos que han desfilado ante la policía y el juzgado afirman que instantes antes de los hechos, la acusada verbalizó su intención de matar a su marido por haber pedido el divorcio y al inquilino al que había alquilado una habitación, por no pagar el precio convenido. Así mismo, expresó su intención de quemar la casa.

La arrestada, a la que le fueron intervenidos un cuchillo y un hacha de cocina, fue arrestada el mismo día del incendio, ocurrido sobre las nueve y media de la noche del 19 de julio. De hecho, admitió desde el principio que había intentado matar al hombre al que tenía alquilada una habitación y que, al parecer, estaba dormido cuando le atacó con el cuchillo. Precisamente por ello, el juez ha mantenido la acusación de intento de homicidio, ya que, además, la víctima llegó a intoxicarse al inhalar el humo que desprendió el colchón al que prendió fuego la arrestada.

De hecho, la víctima tuvo que ser evacuada de urgencia al Hospital La Fe, en cuya unidad de cuidados intensivos permaneció varios días, hasta que los médicos lograron que respirase de nuevo por sí mismo. Al parecer, era la primera acción violenta de la mujer, que según informaron fuentes policiales, no tiene antecedentes.