El Valencia y la Unidad Central Operativa de la Policía buscan al responsable del lanzamiento de la botella que impactó en Neymar Jr después del tercer gol del Barcelona, el pasado sábado en Mestalla. Con las imágenes de vídeo y la información que maneja la policía, se confía en identificar al autor del botellazo que salió desde la grada ocupada por la Curva Nord. El club asume que va a recibir una fuerte sanción económica por parte de la Comisión Antiviolencia pero confía, pese a la relevancia mediática del lance, en que no se cierre Mestalla o se deba jugar sin público.

En las alegaciones previas el Valencia presentará como atenuantes que ni Neymar ni Luis Suárez —que también cayó al suelo— precisaron de asistencia médica y pudieron continuar jugando los breves instantes finales que le quedaban al partido. El club, que no tardó en condenar los hechos, ha analizado las imágenes y argumentará —sin querer justificar el incidente— que en la celebración del tanto Sergio Busquets y Neymar se encararon con el público. El Valencia entiende que ese comportamiento alimentó la gresión posterior.

La polémica dificulta más la relación entre la entidad de Mestalla y la Curva Nord, después de un verano en el que la decisión del club de limitar a 30 años la dad de pertenencia a la grada de animación, apartó de ese sector a las cabezas visibles del grupo ultra. El divorcio es total y desde la Curva Nord se pudo apreciar este pasado sábado una pancarta contra la presidenta del Valencia, Layhoon Chan.

El botellazo fue el capítulo final de uno de los partidos más crispados que se recuerdan recientemente en Mestalla, y que empezó con el lanzamiento de un paquete de pipas al rostro de Paco Alcácer. Las fricciones subterráneas fueron constantes. Enzo Pérez, que había sido el primer valencianista en intentar aplacar la furia de los hinchas tras el botellazo, se encaró con Neymar, por quien se había interesado, después de una burla del brasileño. No es el primer desencuentro de Neymar con los valencianistas. El año pasado, tras el 7-0 en Copa del Rey, se mofó de Barragán susurrándole «cobro 10 veces más que tú». Dos meses después el Valencia ganaba 1-2 en el Bernabéu y Neymar respondió con un manotazo por la espalda al exlateral valencianista. Más allá de las polémicas del gol de Messi en fuera de juego o de penaltis no pitados, los jugadores blanquinegros manejaban más agravios al final del encuentro, centrados en los excesos verbales de Messi con un linier (nada más recibir la amarilla), Busquets y una trifulca dialéctica con el delegado del Barcelona, en el túnel de vestuarios.

Atentos al informador de la Liga

Otro de los focos de atención vendrá de la Liga. Su «informador» recogió los tensos cánticos que se escucharon en la grada contra Alcácer, Messi y Luis Suárez, y el club podría recibir otro castigo.