Finalmente, tras el conato de desahucio anunciado el jueves pasado en el barrio del Cabanyal, el Ayuntamiento de Valencia ejecutó ayer el desalojo de una vivienda situada en la calle Francesc de Eiximenis. Elsa Dos Santos y su hijo, todavía menor de edad, abandonaron el inmueble por la mañana, tras "los mazazos, los estirones y las provocaciones de la policía", aseguró a Levante-EMV la afectada.
"No puedo explicar cómo estoy. Todo el mundo tiene derecho a una vivienda, me he sentido humillada", narró Dos Santos. Según cuenta la vecina, los agentes no le permitieron sacar todas sus pertenencias de la vivienda, aunque llevaba toda la semana trasladando muebles y demás enseres a casas de vecinos, que se han ofrecido a ayudar a la afectada. Los vecinos corroboran la versión de la afectada de que sólo debe 3 meses de alquiler.
La asociación de vecinos de El Cabanyal, que ya se volcó el pasado jueves para evitar el desahucio, declaró que "llama la atención esta forma tan contundente de actuar frente a una indefensa vecina, que su actual situación económica le impide pagar con prontitud unos recibos de alquiler, frente a la desidia municipal que no paga los gastos de escalera en algunas de sus propiedades".
La mujer vivía en la casa, propiedad de Cabanyal 2010 (entidad creada para ejecutar la prolongación de Blasco Ibañez) desde 2007 y según el Tribunal Superior de Justicia debía facturas anteriores a las denunciadas por la sociedad.
