El concejal socialista Vicent Sarriá ha denunciado hoy la caótica situación del entorno de el templo parroquial de San Miguel y San Sebastiàn situado frente al Jardín Botànico, un espacio que fue declarado Bien de Inerés Cultural (BIC) en 1983.

Según han informado fuentes socialistas, el templo parroquial, que perteneció al convento de Mínimos de San Francisco de Paula, posteriormente demolido, se construyó en 1739 con proyecto de José de Cardona y Pertusa. Se trata de una iglesia de planta latina con capillas entre contrafuertes, comunicadas entre sí, entre las que destaca la del Beato Gaspar Bono.

Según el concejal socialista, sería conveniente que el Gobierno Municipal "se tomara más en serio la recuperación de espacio público en la ciudad, y una buena oportunidad sería actuar en el entorno de los 60 edificios incorporados en el Catálogo de Bienes Estructurales de Valencia, para que dispongan de unos accesos peatonales y queden integrados de una manera más digna, lo que sin duda realzaría su monumentalidad y fomentaría las visitas".

"El entorno de San Miguel y San Sebastiàn pone de manifiesto la indiferencia del Gobierno Municipal del PP por el patrimonio" ha manifestado Sarrià.

"Una plaza ocupada por los coches y con solares abandonados que fueron reservados por el PGOU de 1989 para un equipamiento público no es la mejor manera de realzar este monumento", ha afirmado Sarriá.

El concejal del PSPV-PSOE ha pedido a la Alcaldesa un proyecto de recuperación del espacio público de la plaza de San Sebastiàn y calles adyacentes, y la redacción del proyecto de equipamientos previsto en el solar de la misma plaza para los vecinos del barrio de Botànic.