El consejo de administración de la Autoridad Portuaria de Valencia aprobó ayer el plan de usos (DEUP) del recinto portuario y su remisión al Ministerio de Fomento para la aprobación definitiva. La APV confía en que el documento, que regula los usos del puerto en mar y tierra y la siempre compleja relación puerto-ciudad, se apruebe antes de acabar el año. El puerto empezó en 2009 la redacción del plan de usos, pero la irrupción de los grandes eventos y, posteriormente, el acuerdo de cesión de la dársena interior a la ciudad, han retrasado la aprobación del mismo.

En la versión definitiva del plan de usos del puerto, que se presentó en noviembre y cuyo plazo de exposición pública fue ampliado a petición de vecinos y grupos políticos, se han realizado algunas modificaciones puntuales. Así se han tenido en cuenta parcialmente las alegaciones de la Asociación de Vecinos de Natzaret, que reclamó al puerto que no invadiese los terrenos que en el convenio puerto-ciudad de 1986 se reservaban a frontera o zona de transición. El puerto ha retranqueado los viales previstos en esta zona.

También se ha rectificado la zona de fondeo de los barcos frente al Saler para respetar el área de vigilancia arqueológica. El Ayuntamiento de Valencia alegó contra la ampliación de la zona de fondeo de buques del puerto frente a la costa del Saler.

En el plan de usos también se recoge la petición de los pescadores de ampliar la zona de uso pesquero dentro de la marina en previsión de un incremento de la actividad.

Las fuentes de la APV consultadas admitieron ayer que la tramitación del plan de usos, una exigencia legal, ha costado mucho tiempo. De hecho aunque se inició en 2009 hubo que empezar de cero en 2013, «porque se han tenido que hacer muchos acoples». La APV confía en que el documento sea satisfactorio para todos».