El 6 de noviembre de 1936, hace hoy 79 años, el gobierno democrático de la II República Española iniciaba su traslado a Valencia. El acoso del ejército nacional a Madrid convirtió al cap i casal en capital del Estado durante casi un año, algo que transformó por completo la vida social, cultural e intelectual de la ciudad en este breve periodo de tiempo. La dictadura pasó como un rodillo por este momento de la historia y no fue hasta bien consolidada la democracia cuando se volvió a reivindicar la efeméride. Sin embargo, la última vez en que las instituciones valencianas celebraron la capitalidad fue en 1986, bajo el mandato socialista. Treinta años después, e impulsados por la iniciativa de la Universitat de València, la institución académica, el ayuntamiento, la Diputació y la Generalitat sumarán esfuerzos para recuperar la memoria histórica de aquel tiempo y ponerlo en valor.

En un acto celebrado en Col·legi Rector Peset, la Universitat de València presentó el programa de actividades que desde ya hasta finales del próximo año va a desarrollar para celebrar el 80 aniversario de Valencia como capital de la II República. La institución académica organizará conferencias, un ciclo de cine, rutas y visitas, exposiciones, impulsará la catalogación del patrimonio republicano y promoverá reconocimiento e instalará elementos públicos como placas o carteles. El 7 de noviembre de 2016 está previsto la inauguración de una gran muestra en La Nau, que por cierto fue sede del Ministerio de Instrucción Pública.

El Ayuntamiento de Valencia ha querido hacer suya esta celebración, según explicó la concejala de Cultura y Patrimonio, Glòria Tello, que anunció que la ciudad «se volcará» con la celebración de esta efeméride. «Pensamos que ya hacía falta un reconocimiento, que es una cuestión de higiene democrática», explicó la regidora. «Vamos a participar de distintas maneras: ayudando a otras administraciones y a la Universitat en todos los proyectos que quieran poner en práctica», anunció Tello que enumeró los proyectos municipales.

El consistorio quiere «poner en valor» los refugios de la Guerra Civil, hacerlos visitables y «museizarlos». «Son muchos y algunos están en espacios públicos y otros en espacios privados, en la ciudad y las pedanías. La intervención la haremos de manera gradual, y evidentemente comenzaremos por los que son públicos, algunos de los cuales están en perfectas condiciones, aunque un poco tapados y la entrada hay que acondicionarla». Se refirió en concreto, a los refugios sitos en la Gran Vía, en la calle Serranos o en el Carrer de Dalt.

Señalización y hacer cumplir la ley

Otra de las líneas de actuación municipal en esta conmemoración contempla la señalización de aquellos lugares y edificios de la ciudad que tuvieron una especial significación o protagonismo durante el año de capitalidad, como sedes de ministerios o las Torres de Serranos. «Aquellos lugares de la ciudad que durante esa época fueron importantes, como la Torres de Serranos, que acogieron parte del tesoro artístico del Estado, o el propio ayuntamiento, donde se realizaron dos reuniones del gobierno de la República Española y se celebró, en 1937, el Congreso de Intelectuales en defensa de la República, organizado por la Alianza de intelectuales Antifascistas», señaló Glòria Tello. La regidora recordó también que seguirán con la política, ya iniciada, «de cumplir la Ley de la Memoria Histórica», en aspectos como la rotulación de calles o la concesión de distinciones.

Por su parte, la Diputació de València, a través del Muvim, organizará a principios del año próximo una exposición sobre «La Modernidad en la República», según explicó el diputado Xavier Rius. Por su parte, el Secretario Autonómico de Cultura e historiador Albert Girona, se comprometió a que la Generalitat apoyará estas acciones «para hacer una gran conmemoración» y revindicó esta iniciativa «para recuperar la memoria desde el punto de vista patrimonial y turístico.