Un grupo de personas con movilidad reducida y usuarios de la playa adaptada de Pinedo ha pedido a la Delegación de Playas del Ayuntamiento de Valencia que cumpla su promesa de aumentar el número de plazas de estacionamiento para este colectivo en esta zona del litoral.

Este grupo de usuarios recuerda que en 2014 el entonces gobierno del Partido Popular ni siquiera les recibió tras presentar un escrito con más de 60 firmas solicitando más plazas para discapacitados. Según explica que el líder del PSPV, Joan Calabuig, les recibió en campaña electoral y accedió a sus peticiones en el caso de que gobernara, pero que una vez en el ayuntamiento, les derivó a Playas «porque no era de su competencia».

Tras preparar un nuevo escrito con más de 70 firmas, la concejal de Compromís, Pilar Soriano, los recibió y se comprometió a pintar las nuevas plazas de estacionamiento. «En principio pedíamos una ampliación del horario de la posta sanitaria para dar más servicio a las personas de nuestro colectivo, pero Soriano nos dijo que, de momento, no había presupuesto para ello. Pero en cambio sí que se comprometió a pintar los aparcamientos. Esto fue antes de Navidad, pero ha llegado el verano y seguimos sin noticias», se lamentó Francisco Vera, portavoz de las personas afectadas.

La ley obliga

En la actualidad tan solo existen cuatro plazas para discapacitados en la zona de la playa de Pinedo, mientras que la oferta de estacionamientos convencionales es numerosísima.

Según un decreto de la Generalitat publicado el pasado 16 de junio y que regula la tarjeta de estacionamiento para vehículos que transportan personas con discapacidad, se establece textualmente que todos los municipios de la Comunitat Valenciana «deberán disponer de un mínimo de una plaza de aparcamiento reservada y diseñada para su uso por personas titulares de la tarjeta de estacionamiento por cada cuarenta plazas o fracción de plazas de aparcamiento en su núcleo urbano y, además, la misma proporción en los principales centros de actividad de los mismos».

Así pues, desde el pasado 17 de junio el decreto ley autonómico obliga al Ayuntamiento de Valencia a pintar estas plazas para personas con movilidad reducida en aquellas zonas donde no exista un número suficiente, como es el caso que denuncia ahora el colectivo afectado de Pinedo.