La Consellería de Cultura ultima, nueve meses después de iniciarse los trámites y un año justo desde que el pleno municipal aprobase su solicitud, el proceso para la declaración de la procesión cívica del 9 d'Octubre como Bien de Interés Cultural Inmaterial y confía en aprobarla antes de la próxima salida en procesión de la Senyera. La procesión cívica, que conmemora la entrada de Jaume I en la ciudad, quedará así blindada por una declaración BIC que excluye del itinerario la entrada en la Catedral y el Te Deum. La declaración a favor de la declaración BIC de la procesión cívica se está armando con los informes positivos remitidos por el Consell Valencià de Cultura y la Universitat de València.

Cultura pidió también informes a la Universidad Católica, que no lo ha remitido, y a la Real Academia de Bellas Artes de San Carlos, cuya Junta General aprobó el 15 de diciembre pasado un informe a favor de la declaración pero instando a «incluir la presencia» de la Senyera en la Catedral por tratarse de una «constante histórica». El informe de la Academia de San Carlos, sin embargo, no ha llegado a la Conselleria y no consta en el expediente, según confirmaron fuentes de la Conselleria de Cultura.

En caso de que los organismos e instituciones de los que se recaba informe no lo presenten en plazo, éste se considerará positivo por silencio administrativo. En todo caso, recalcan las fuentes de la Conselleria de Cultura, la declaración «sigue adelante» porque ya cuenta con los dos informes positivos preceptivos, esto es, el del Consell Valencia de Cultura y el de la Universitat de València.

El informe del Consell de Cultura, aprobado con once votos a favor y seis en contra, no contempla el Te Deum como elemento fundamental de la procesión, al contrario de lo que hacía el dictamen de la Academia de Bellas Artes que considera que el paso por la catedral cuenta con «arraigo» probado y aconseja que se incluya en el recorrido. Sin embargo, el CVC dejaba en manos del gobierno de la Generalitat y el Ayuntamiento del momento la decisión sobre el itinerario. «Respecto al itinerario, horario, contenido y asistentes, parece razonable que el Ayuntamiento y la Generalidad, que en estos momentos comparten actos y celebraciones, procedan a determinar los contenidos, protocolos e itinerarios de la procesión». El dictamen del CVC propone ademas, la interpretación del Himno nacional de España y también de la Marcha de la Ciudad y del Himno Regional.

La Universitat de València destaca en su informe a favor de la declaración BIC de la procesión cívica que «si bien en origen el trasfondo religioso es fundamental, pronto la ciudad y el reino toman los actos como un claro elemento de justificación política, de identificación colectiva y cívica». Por eso, continúa, «la llamada procesión cívica que conmemora la efeméride adquirió aún más reconocimiento oficial y social a partir de la recuperación democrática en el ultimo tercio del siglo XX, especialmente después de la promulgación del estatuto de Autonomía el 1982, que declara el 9 d'octubre Dia de la Comunitat Valenciana». «En este sentido se puede hablar de una resignificación de la conmemoración y de una transformación o recreación del ritual».

Una de las primeras medidas que tomó el nuevo alcalde de Valencia, Joan Ribó, de Compromís, fue suprimir el paso de la Senyera por la Catedral, una costumbre que había recuperado el anterior gobierno del PP de Rita Barberá, después de sus predecesores del PSPV, Ricard Pérez Casado y Clementina Ródenas, eliminasen el paso por la Seo. El actual gobierno de la Nau (Compromís, PSPV y VLC) quiere así blindar el carácter laico y sin entrada en la Catedral frente a futuros cambios de recorrido por parte de otros gobiernos.

Alegaciones rechazadas

La Conselleria de Cultural ya tiene redactado el informe de alegaciones a la declaración BIC, que ha recibido una única alegación del PP firmada por el concejal Alfonso Novo, quien solicita que se rectifique el texto de la declaración, que no incluye el paso por la Catedral, porque «incurre en valoraciones, identificaciones, definiciones de ámbitos espaciales y territoriales de las que discrepan y que alteran el desarrollo histórico y la tradición de la procesión». Consideran que la declaración no debe circunscribirse únicamente a la ciudad de Valencia y «debe tener la consideración y proyección de ámbito regional». Añaden que la presencia de la Senyera en la catedral «es constante desde la época de los Fueros» y que «destaca el carácter cristiano del nuevo reino creado».

El PP de la ciudad solicita en definitiva el mantenimiento de la celebración del Te Deum con la entrada de la Senyera en la Catedral, así como la interpretación del himno nacional y el disparo de salvas de ordenanza por el piquete militar en rendición de honores a la bandera. La conselleria ha desestimado las alegaciones del PP por entender que es «necesario recrear los rituales en contextos de sociedades democráticas y plurales». Las alegaciones del PP, afirma la conselleria, «no van en contra de la futura declaración del bien inmaterial, son más bien consideraciones respecto a su descripción histórica y al mantenimiento del Tedeum con la entrada de la Senyera en la Catedral».