El tono conciliador de Luis Santamaría en la rueda de prensa de ayer no terminó de calmar los ánimos en el Grupo Popular, pero sí sorprendió positivamente, sobre todo porque se ha pasado de pedir dimisiones a hablar de colaboración. «Ha sido un poco sorpresa», dijeron fuentes del grupo, que aseguraron que ellos «siempre han ofrecido colaboración y han tendido la mano a la gestora» a sabiendas de que muchos de sus integrantes «lo único que querían» era su salida del partido.

Las fuentes no quisieron hacer muchas más valoraciones, porque lo que pase de ahora en adelante es una incógnita. «Lo único que se puede decir es que nosotros estamos a su disposición porque nosotros somos los que conocemos la gestión municipal».

Más satisfecho quedó el portavoz del grupo, Eusebio Monzó, que además de liderar la labor de oposición en el Ayuntamiento de Valencia se ha visto en la tesitura de ejercer de mediador entre ambas partes.

Reparto de funciones

Según explicó a Levante-EMV, la labor de oposición del grupo y de la gestora es perfectamente compatible. De hecho, él mismo ha trabajado para que se haga una especie de reparto de funciones. Así, Luis Santamaría y el resto de integrantes de la gestora podrían centrarse en los distritos, que es donde el partido tiene ahora más dificultades para llegar, y que los concejales sigan haciendo con normalidad su labor en el ayuntamiento de Valencia, entre otras cosas por una cuestión de operatividad.

Eso sí, Monzó ha pedido también que para abordar determinados temas por parte de la gestora se coordine con los concejales, que son los que manejan la información con más detalle. Concretamente, cree que Alfonso Novo, citado ayer por Santamaría, debe tener un papel de interlocución, ya que «ha ejercido de portavoz y tiene más criterio en los temas de ciudad».

«Yo hablo con Luis Santamaría todas las semanas y le doy mi opinión sobre todo esto. Yo creo que hay que coordinarse y tener mucho respeto entre nosotros, porque sólo así encontraremos puntos de encuentro», dijo el actual portavoz del Grupo Popular, que pese a la dificultad de la situación, está convencido de que «se puede hacer un buen trabajo» conjunto.