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Medida

El cambio de nombre de 51 calles afectará a 20.000 ciudadanos de València

El ayuntamiento pide colaboración a las empresas de servicios y a los organismos públicos para adaptar sus listados a la nueva nomenclatura

Cerca de 20.000 vecinos de València se verán afectados en mayor o menor medida por el cambio de nombre de sus calles. Así pues, el ayuntamiento de la capital ya ha puesto en marcha una serie de medidas y recomendaciones que aligeren el impacto de esta decisión municipal en el día a día de los ciudadanos. En concreto, la concejala de Cultura, Glòria Tello, ha enviado una carta personal a una decena de empresas de servicios y organismos públicos pidiéndoles colaboración para modificar sus listados de clientes e introducir los nuevos nombres de calles. Y en el caso de los documentos oficiales, como el DNI o las escrituras, Tello asegura que seguirán teniendo validez los nombres actuales hasta que sea obligado renovar el carné o sea necesario realizar algún trámite.

El Ayuntamiento de València ha anunciado que antes del verano cambiará el nombre de 51 calles que no se ajustaban a lo dispuesto en la Ley de la Memoria Histórica, concretamente los que evocan el régimen franquista o a dictadura. Todos esos nombres serán sustituidos por los de personajes ilustres, luchadores de los derechos humanos, artes o valores de común aceptación, con gran presencia de mujeres.

Los casos concretos

Pero claro, esos cambios de nomenclatura tienen un efecto directo sobre la documentación de las personas (DNI, carné de conducir), los recibos de la luz o del agua, las escrituras de bienes inmuebles, etc. Y el ayuntamiento, que es el que promueve los cambios, tiene que facilitar la adaptación administrativa, cuestión a la que ya se comprometió la concejala Glòria Tello en su primera comparecencia.

De hecho, ya ha dirigido una carta a las empresas de servicios Telefónica, Iberdrola, Empresa Mixta de Aguas, Repsol Butano, Cegas y Aguas de València para que cambien el nombre de las calles que aparecen en sus listados y en sus recibos. Y también se ha dirigido a la Delegación de Hacienda, los Servicios Territoriales de la Conselleria de Sanidad y Consumo, el Centro de Gestión Catastral, el Colegio de Notarios y la Delegación del Gobierno de la Comunitat Valenciana para que faciliten los cambios en los carnés personales, las escrituras, las hipotecas o las tarjetas sanitarias.

En el caso del Documento Nacional de Identidad (DNI) o las escrituras de una casa, la concejala Glòria Tello asegura que seguirán teniendo validez con los nombres actuales hasta que se haga necesaria su renovación, en el caso de los carnés, o se produzca alguna operación comercial, en el caso de las escrituras. Es decir, no es necesario acudir corriendo a las oficinas a cambiar los documentos.

A este respecto, fuentes de la Policía Nacional precisaron que no es obligatorio, aunque sí conveniente, cambiar el DNI o el pasaporte. Y para quienes quieran hacerlo indicaron que será necesario aportar un certificado de empadronamiento con el nuevo nombre de la calle, igual que se hace con un cambio de domicilio normal. La operación es gratis.

Coordinación de servicios

El Ayuntamiento de València ya ha asegurado que todos los servicios municipales se están coordinando para facilitar los documentos y certificados que puedan necesitar los vecinos para hacer cualquier cambio o trámite, como el que indicaba la policía.

El consistorio también hará llegar a todas las personas afectadas por el cambio de los nombres de las calles un folleto informativo en el que les comunicará el acuerdo adoptado por la Junta de Gobierno (la semana que viene), así como los teléfonos de contacto que se habilitarán para informar a la ciudadanía, otras de las medidas que está previsto arbitrar en las próximas semanas.

Por su parte, la Delegación de Correos en València ha garantizado el perfecto funcionamiento de la correspondencia, pues basta con introducir en las máquinas el nombre de las nuevas calles y simultanear el nuevo y el viejo durante un tiempo prudencial para que el proceso se complete con garantías. En total, en la Concejalía de Cultura calculan que pueden estar afectadas cerca de 20.000 personas y confían en que no haya problemas de importancia.

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