En una cosa sí que coinciden los dos titulares de concejalías: la posterior inspección de Bomberos, que trajo consigo la clausura para el viernes 30 de la grada no tiene que ver con el accidente. «Es la que, de oficio, se tiene que realizar para autorizar los espectáculos de este tipo. Y tras el informe negativo se trabajó de firme para que el lunes 3 ya estuviera habilitada» dijo Menguzzato, a lo que Fuset añadió que «está fuera de lugar tratar de buscar relación entre un hecho desgraciadísimo como es el accidente y una negativa tras una inspección normal».
Pere Fuset hizo ayer una cronología de los acontecimientos y reiteró que «el accidente se produjo el martes 27 y no nos llegó ninguna comunicación. El jueves 29 es cuando empezamos a escuchar rumores y preguntamos por correo electrónico, para que hubiese constancia. Aún ese día, la comunicación que recibimos era de que había ocurrido un accidente, pero sin gravedad».
Fueron las redes sociales y, en concreto, un ateneo anarquista, los que fueron extendiendo la gravedad del hecho. «Ante la persistencia hablé con el jefe de la Policía Local. No tenía una constancia inmediata del tema, pero sí que nos lo confirmó poco después. Cuando ya teníamos una información veraz, y estamos hablando de las nueve y veinte de la noche aproximadamente, convocamos de urgencia a los promotores y les exigimos que nos dieran lo que fuera de utilidad».
Visita al hospital
El martes, «a las ocho y media de la mañana analizamos el tema en el gabinete y decidimos ir directamente al hospital, tanto la concejala Pilar Soriano como yo. Hablamos con la familia y nos dieron las primeras noticias más o menos concretas». Incluso aquí también hay fricción con Anaïs, porque la concejala socialista aseguraba ayer que «bueno, yo hablé con la gerente del hospital directamente».
La comunicación de ayer de la Asociación de Promotores Musicales de la Comunitat Valenciana reiteró que «ha solicitado a la empresa instaladora de las gradas toda la información y documentación sobre el caso». Y se mantienen en la opinión con la que discrepa la concejala: juzgar sobre las apreciaciones de la Policía Local: «Hay que recordar que la Policía Local de València señaló en sus primeras diligencias que el origen del accidente no se podía achacar a la ausencia de medidas de prevención, ya que la empresa había suministrado los equipos de protección individual».
Fuset dijo que «nos preocupa tanto la seguridad que hicimos un Plan de Autoprotección, que no era obligatorio, y el preceptivo Proyecto de Actividad Eventual. No ahorramos ni un céntimo en seguridad».
