La Federación Valenciana de Alternativa Sindical de Trabajadores de Seguridad Privada denunciaba ayer ante la Inspección Provincial de Trabajo y Seguridad Social de Valencia la presencia de una plaga de pulgas en La Fe de Campanar que afecta a los vigilantes, por lo que ha pedido que se levante acta de infracción contra la empresa que gestiona el servicio de seguridad y contra la dirección del hospital, dependiente de la Conselleria de Sanidad, por incumplir las disposiciones mínimas de seguridad y salud en los lugares de trabajo. En la denuncia realizada, el sindicato apunta que las instalaciones de la antigua Fe de València se encuentran «en desuso y abandonadas», por lo que un equipo de 34 vigilantes de la empresa que se encarga de la seguridad en el recinto permanecen en la zona para evitar robos y la comisión de actos vandálicos en su interior. Ante esta situación de abandono, una colonia «bastante amplia» de gatos se ha instalado en el centro y son alimentados, previa autorización de la dirección del hospital y del Ayuntamiento de València, por una protectora de animales.

La presencia de estos animales en La Fe de Campanar «ha provocado, a su vez, la existencia de una gran plaga de pulgas», que según el sindicato, «se han convertido en un auténtico problema para los vigilantes de seguridad y otros colectivos que allí trabajan a diario, como puedan ser limpieza y mantenimiento». Así, señalan que los vigilantes de seguridad concluyen su jornada laboral con «varias picaduras de pulga cada uno de ellos» puesto que «es imposible evitarlas debido a la gran cantidad existente por todo el recinto hospitalario». Por ello, solicitan a la Inspección Provincial de Trabajo y Seguridad Social de Valencia que actúe para poner remedio a esta situación y levante acta de infracción contra la empresa y la dirección del hospital.