La escuela empieza a incorporar más tabletas, pizarras digitales o códigos de realidad aumentada, instrumentos que dibujan un nuevo escenario en la enseñanza para una generación que ha nacido inmersa en la tecnología.

El "modo avión", en el que el alumno debe apagar todos sus aparatos electrónicos al entrar a clase, "está obligado a cambiar" para dar paso a la inclusión de la tecnología en el aula, ha explicado a EFEfuturo con motivo del Día Mundial de la Alfabetización el profesor Diego Redondo, del centro madrileño de educación para adultos Distrito Centro.

La Comisión Europea ha instado a impulsar actividades que apoyen la alfabetización digital, entre otras cosas porque la UE se enfrenta a una demanda creciente y no cubierta de entre 700.000 y 900.000 profesionales TIC, según datos de la propia Comisión.

Un estudio elaborado por el Instituto Nacional de Tecnologías Educativas y de Formación del Profesorado (INTEF), sobre la implantación de las TIC en la educación, afirma que su uso en las aulas españolas es ligeramente inferior a la media europea y no ha aumentado tanto como era de esperar desde 2006.

Mónica, Elena y Marina no son periodistas, pero desde que se puso en marcha el proyecto 2.0 en el centro escolar madrileño Alameda de Osuna, escriben en el periódico digital, graban programas de radio, trabajan con códigos QR y almacenan sus trabajos en Symbaloo, una web que sirve de "estuche digital" para almacenar las aplicaciones tecnológicas necesarias para trabajar en el aula y fuera de esta.

Plataformas virtuales como Moodle, Edmondo o Eleven, donde los profesores pueden colgar los apuntes, generar foros de debate o evaluar, cimentan un nuevo sistema de alfabetización donde la tecnología cobra protagonismo en detrimento del papel.

"El papel fue lo más adecuado para difundir información el siglo pasado, pero no lo es ya para una generación que no tiene una familiaridad con éste", ha indicado Enrique Dans, profesor de Sistemas de Información en IE Business School.

No obstante, Víctor y Álvaro, alumnos de secundaria del Alameda de Osuna, no creen que se deje de escribir en asignaturas como lengua pero se muestran convencidos de que algunos libros están abocados a desaparecer porque el ordenador "es más eficiente", aunque "chivan" a EFEfuturo que algunos compañeros "se distraen".

Aunque este problema se empequeñece al lado del desfase de medios entre escuela pública y privada o de que una misma generación avance a ritmos distintos según su zona y su comunidad autónoma, según explica la profesora y miembro de la Fundación Trilema, Beatriz Álvarez.

Esta profesora, que recorre centros españoles y europeos para comprobar la implantación de las TIC, aboga por hacer un sistema legislativo común en materia tecnológica y ha señalado que con "pocos recursos se puede transformar el sistema de aprendizaje".

En el colegio público madrileño Divino Maestro los alumnos no disponen de grandes medios en el aula pero hacen porfolios interactivos, realizan trabajos que le preparan para resolver situaciones reales y trabajan en "web quest", una plataforma que guía al alumno para que llegar a más fuentes de información, ha explicado Marina, una alumna de 4º de ESO.

Por otra parte, Beatriz Álvarez sostiene que la transformación la debe impulsar el profesorado.

"El profesor se tiene que implicar, formarse, y creer en este cambio metodológico porque si no será incapaz de transmitir a los alumnos", opina el profesor y coordinador TIC de Distrito Centro Diego Redondo, galardonado con el Premio Espiral por su blog educativo.

La profesora Dácil González, del colegio Alameda de Osuna, explica que la educación del futuro, que ya es presente en algunos colegios, plantea una nueva forma de enseñar: "El rol del profesor ha cambiado, ya no es el que traslada el conocimiento, sino un guía que se lo facilita a los alumnos y que provoca que sean más interactivos".