Un buen resultado para Sánchez

Patricio Simó

Patricio Simó

El PNV ha sido el ganador de las elecciones del pasado domingo por un estrecho margen de 30.000 votos respecto a la segunda fuerza política que ha sido EH Bildu, que gana en Álava y Gipuzkoa, empatando en número de escaños, 27 cada una.  Esto deja un parlamento vasco con una clara mayoría para las fuerzas nacionalistas e independentistas con 54 escaños de los 75 que componen el parlamento. El acuerdo para que ambos partidos gobiernen en coalición está descartado porque ambos mantienen programas políticos muy distintos, sobre todo en materia económica y social, donde el PNV se sitúa más cerca del PP que de EH Bildu.

El PNV a quien las encuestas situaban por detrás de EH Bildu ha salvado finalmente los muebles, pese al claro crecimiento del partido de Otegui que sube seis diputados respecto a las últimas elecciones.

El PSE se convierte, como han mantenido durante toda la campaña y como recogía su eslogan electoral “vota al que decide” en la llave para la gobernabilidad de Euskadi y da un respiro a Pedro Sánchez y sus socios de coalición. El PNV ha perdido cuatro diputados, un desgaste lógico tras varias décadas de gobiernos peneuvistas, salvo el paréntesis de Patxi López, gracias al apoyo de los populares, pero ha sido la fuerza política más votada por delante de EH Bildu que ha absorbido el voto de Unidas Podemos que pierde sus seis diputados.

El voto de los indecisos ha sido fundamental para la victoria del PNV que ha sabido movilizar ese voto, sobre todo después de que el candidato de EH Bildu Pello Oxtandiano se negara a llamar a ETA banda terrorista. Estas declaraciones a EH Bildu no le han pasado factura porque forma parte de su discurso político.

El PP que mejora resultados y ha hecho una buena campaña electoral en el País Vasco se equivoca en su discurso de insistir en el blanqueamiento de Bildu por parte del presidente del Gobierno Pedro Sánchez y siguen sin entender que quien ha dado los votos a EH Bildu no ha sido Pedro Sánchez sino los electores vascos. El PP ve la mano de Sánchez en todo. También detrás de las papeletas.

Habría que preguntarse en todo caso porque el partido de Otegui sigue ganando votantes elección tras elección. Una buena parte de este éxito se debe a la desaparición de la banda terrorista ETA y al hecho de que han abandonado en parte el discurso identitario para centrarse en hablar de los temas que preocupan a los ciudadanos vascos. También han catapultado todo el voto joven.

El PP no consigue arrebatarle a Vox el escaño que mantiene en Álava y Sumar entra en el parlamento vasco con un diputado. Ambos partidos han obtenido unos resultados irrelevantes en la política vasca, algo que ya se daba por hecho.