Visitando la magnifica Lonja de València, he sentido vergüenza ajena al ver la placa situada en el salón del segundo piso, toda rayada, en la que se cita a la alcaldesa fallecida Rita Barberá como la que hizo que se arreglase su suelo: ¡ Póngase dignamente y fuera del alcance de los vándalos, ¡o suprímase ... o caiga la vergüenza a quien corresponda.