Daniel Llorens, Bolonia. enviado especial

Cersaie ha puesto de manifiesto que la cerámica ha recuperado la personalidad y el espíritu de la moda pop de las décadas de los 60 y 70 a través de la búsqueda de un lenguaje gráfico y cromático propio que se aleje de las típicas imitaciones de piedras, y para ello se ha recurrido a efectos fundentes a base de selenio o goteados de esmaltes, entre otras técnicas, al tiempo que la paleta cromática se vuelve notablemente más cálida y viva al usarse los tonos densos, siendo especialmente destacable la presencia de todo tipo de tonos rojos en las más innovadoras propuestas firmadas por los grandes productores transalpinos.

De hecho, los técnicos de Alicer, el instituto tecnológico dedicado al diseño cerámico, aseguran que en esta nueva edición de Cersaie «se percibe un importante aumento de las paletas de colores y entre ellas destacan los colores vivos, muy alegres y una oferta en general muy amplia y plural, en la que todo se multiplica». Incluso en el porcelánico se mantienen los colores saturados, muy vivos y brillantes, hasta en las piezas de gran formato, como el 60x60 o mayores.

En este sentido, desde Alicer se subraya de una manera muy especial un intento de que la cerámica permita que su aspecto final y definitivo corresponda al gusto del prescriptor o del usuario. Es decir, se ha avanzado un nuevo escalón en la idea de personalizar la cerámica: Frente a tan amplia oferta y tal multiplicidad de propuestas, aparece de modo simultáneo una tendencia hacia la personalización, a la búsqueda de una identidad frente a la magnitud de la oferta de tipo global. «El usuario quiere sentir que es único», explican los técnicos del instituto tecnológico de diseño cerámico.

Pero, además, en los pabellones y stands instalados en Cersaie también se percibe, y de manera muy clara, «un deseo de retomar el aprecio y distinción por el patrimonio cultural, respondiendo a la necesidad que existe de identificarnos con nuestra propia cultura». De hecho, la gráfica propia de la cerámica de principio de siglo, o el uso irregular de los colores, se ha convertido ya en algo habitual.

Desde Alicer también se destaca la gran variedad de relieves mecanizados que se han presentado en feria, así como «la aplicación de distintas técnicas decorativas entre las que queremos destacar aquellas realizadas con efectos producidos con láser». En este sentido, son especialmente destacables las impresionantes y perfectas imitaciones textiles (bordados, encajes...) que presentan los italianos y en las que destacan unas gráficas muy poéticas, etéreas y sutiles que acompañan pero no sobrecargan el producto final. Pero también son muy interesantes las vanguardistas y decorativas baldosas iridiscentes que hasta hoy se podrán ver en los stands de Aparici o Azuvi, por ejemplo.

Otro punto a tener en cuenta es que en la edición de Cersaie celebrada este año se mantiene, e incluso amplía, la oferta encaminada a la accesibilidad universal, con piezas y sistemas concebidos para mejorar la vida de las personas que presentan algún tipo de discapacidad.