Noemí Oms, Peñíscola

Un turista madrileño falleció ayer ahogado mientras se bañaba en la playa del Ruso, en una zona rocosa del sur de Peñíscola donde no hay vigilancia, según informaron fuentes de la empresa Saepla que está encargada de esa labor en el litoral en dicho municipio. La víctima pudo sufrir un corte de digestión, según las primeras hipótesis.

El fallecido, al parecer, después de comer, se adentró en la playa del Ruso hasta que en un momento su hijo vio que el cuerpo estaba flotando junto a la cala del Pebret, dado que la corriente lo había arrastrado, por lo que se lanzó a auxiliarlo y con la ayuda de dos bañistas lo sacaron hasta las rocas y trataron de reanimarlo.

Rápidamente llamaron al 112, desde donde se movilizaron dos embarcaciones de salvamento y dos ambulancias. A pesar de los intentos por salvar la vida del bañista, éste falleció.

Hasta el lugar de los hechos se desplazaron agentes de la Policía Local de Peñíscola y de la Guardia Civil que han abierto una investigación para esclarecer las circunstancias de la muerte.

El fallecido de Peñíscola es la primera muerte por ahogamiento que se produce este verano en las playas del litoral de la provincia de Castelló y, como ya ocurriera el año pasado, se ha producido en una zona en la que no había vigilancia. Este año los ayuntamientos han endurecido las medidas para evitar imprudencias de los bañistas. Este último extremo, que consiste en sanciones, se refiere a aquellos bañistas que se adentran en el mar con bandera roja y haciendo caso omiso a las indicaciones de los socorristas.

El pasado domingo perdió la vida un ciudadano rumano, pero afincado en Almassora, que se ahogó cuando se bañaba en el pantano de Sitjar.