Xavier Manzanet, Vila-real

Facsa inauguró ayer en Vila-real una instalación solar fotovoltaica con capacidad para producir 760.000 kilovatios hora al año. Esta energía equivale al consumo energético para abastecer de agua potable a una población aproximada de 30.000 habitantes, cerca del 60% de la población de Vila-real, o al consumo energético de una Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de unos 14.000 habitantes equivalentes (más de 57% del consumo de la EDAR de Vila-real).

La planta ocupa una superficie de 14.500 metros cuadrados, de los que aproximadamente 4.000 corresponden a módulos fotovoltaicos. La instalación está compuesta por 2.465 módulos de silicio policristalino, fabricados en la Comunitat Valenciana con tecnología alemana y una potencia nominal de 500 kW.

4 millones de euros

El proyecto, en el que la empresa de servicios del grupo Gimeno ha invertido cerca de 4 millones de euros, se inició en agosto del año 2006, con la autorización del punto de conexión en la red de distribución, y ha concluido en agosto de 2008, con la autorización de explotación y la inscripción definitiva en el régimen especial. La empresa encargada de realizar la ingeniería, dirección de obra e instalación ha sido la firma castellonense Proyectos e Instalaciones Elektrosol.

Esta instalación permitirá un ahorro de emisiones de CO2 de, aproximadamente, 600 toneladas al año frente a las centrales de fuel y gasoil. A lo largo de su vida útil, esta planta ahorrará la emisión de 23.774 toneladas de CO2 a la atmósfera.

El acto de inauguración celebrado ayer contó con la presencia del conseller de Infraestructuras, Mario Flores, además del alcalde de Vila-real, Juan José Rubert, y el director general de Energía de la Generalitat, Antonio Cejalvo, entre otros. El presidente de Facsa, Enrique Gimeno, destacó que, con la puesta en marcha de la planta, la empresa refuerza su "apuesta por la sostenibilidad y el compromiso con el entorno". Gimeno destacó que esta instalación supone "un punto de inflexión en el compromiso social de la empresa", ya que pasa "de proteger el medio ambiente a través de la gestión del ciclo integral del agua, a mejorarlo con la generación de energías limpias".

Por su parte, el conseller de Infraestructuras, Mario Flores, destacó la "inquietud" de una empresa como Facsa a la hora de apostar por este tipo de energía y subrayó el ahorro en emisiones de CO2 que supondrá esta instalación. El alcalde, Juan José Rubert, felicitó a Facsa y al grupo Gimeno "por la apuesta para respetar el medio ambiente, por la diversificación de energías y por la generación de energías limpias, además de por la limpieza y tratamiento de las aguas que hace realidad Facsa".

4.000 instalaciones en la Comunitat

El conseller Flores recordó que ya son realidad más de cuatro mil instalaciones en la Comunitat Valenciana "donde es decisiva la apuesta de las empresas hasta el punto que se ha pasado, en tres años, de generar 3 megawatios a pasar a 220. El deseo es el de conseguir la autosuficiencia energética y que podamos llegar, en un par de años, a tener energías renovables en un cuarenta por ciento. En la comarca de La Plana ya se está en el 10%".

Además, Flores reseñó que "las plantas y empresas que trabajan en este sector generan puestos de trabajo, un aspecto positivo en estos tiempos de crisis". Por último, el conseller de infraestructuras lamentó que el gobierno central "haya rebajado las ayudas para este tipo de instalaciones en más de un 30%, aunque desde la Generalitat queremos continuar facilitando la tramitación de cuanto sea necesario".