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La empresa de estibadores del puerto de Castelló(Estiba) ha promovido un expediente de regulación de empleo temporal (de 180 días) a causa de la drástica caída de los tráficos portuarios. El ERE afecta a la totalidad de la plantilla (141 empleados) y es rotatorio. Los operarios trabajan por turnos en función de las necesidades de cada día.

Y es la que la actividad de la sociedad Estiba de PortCastelló se ha visto mermada de forma considerable en este primer semestre por el descenso de embarques y desembarques. El volumen de trabajo de la firma ha bajado este año a la mitad, en torno un 46%. De esta manera cada día trabajan de media unos 70 de los 140 operarios. El expediente de regulación se inició en mayo y finalizará en octubre. Con este ERE, los trabajadores conservan sus derechos adquiridos y cobran sus salarios íntegros. Las jornadas de inactividad son sufragadas a través de las prestaciones por desempleo, excepto ocho días que los paga la misma empresa.

Fuentes de Estiba subrayaron que en julio se ha constatado una ligera mejoría, pero muy endeble. La actividad de carga y descarga sigue siendo un 40% inferior a la de hace un año.

Este ERE y el menor ritmo de trabajo responde a la reducción del movimiento de materiales relacionados con la construcción y especialmente con la cerámica en el puerto de Castelló. Han disminuido tanto las exportaciones como las importaciones de la provincia. El parón del azulejo ha reducido el tráfico de materias primas y de graneles sólidos, sobre todo los productos relacionados con el azulejo. Tal com publicó este diario, hasta junio el tráfico de arcillas se ha desplomado un 77%, el de azulejos y baldosas un 40%, el de fritas y esmaltes un 19% y el de feldespato un 67%. El de graneles sólidos ha bajado un 63% y el de contenedores un 34%. A nivel global, el tráfico de Port Castelló se ha reducido un 22% en los primeros seis meses de año.

Este hecho ha incidido en las concesionarias de las terminales de graneles sólidos, en las líneas de contenedores, así como en los estibadores. El puerto ha dejado de crecer de golpe por la crisis financiera e inmobiliaria. La Autoridad Portuaria ha impulsado de momento una reducción de las tasas y ha creado un comité anti crisis.

Bajan las exportaciones

y las importaciones

La delicada situación del puerto de Castelló no sólo constata un descenso de las exportaciones de la provincia sino también de las importaciones. Los envíos al exterior han descendido un 30% hasta mayo mientras las importaciones han caído un 43%. Un hecho que mantiene positivo el saldo comercial de la provincia pero que ha desplomado los tráficos portuarios.

El principal sector exportador de Castelló, como el azulejo, ha sacado al exterior un 22% menos de productos que en el año anterior. La cerámica copa el 60% de las exportaciones de Castelló. Sus pedidos en los primeros cinco meses de año han alcanzado un valor de 1.004 millones de euros.

El movimiento comercial en los mercados internacionales se ha frenado como consecuencia de la crisis económica. Han disminuido las exportaciones a Estados Unidos, Francia o Reino Unido, unos de los principales países emisores de los productos cerámicos de Castelló. También se han contraído los envíos a los países no comunitarios y a Asia.

En el puerto, en cambio, han aumentado los tráficos de graneles líquidos. Los productos derivados del petróleo siguen llegando por la actividad de las refinerías del polígono del Serrallo y la puesta en marcha de una planta de biodiesel en la dársena sur.