El nuevo Plan Estratégico de Turismo de la Comunitat Valenciana 2010-2020, presentado ayer en Castelló, fulmina de manera definitiva el parque temático de Mundo Ilusión, la principal propuesta turística proyectada por el presidente de la diputación, Carlos Fabra. Este nuevo programa, que establece la hoja de ruta turística en las tres provincias para la próxima década, "no recoge como una prioridad Mundo Ilusión", admitió ayer el coordinador del mismo y director del Instituto Valenciano de Tecnologías Turísticas (Invattur), Josep Ivars. El Gobierno valenciano mantiene, en cambio, la construcción de la Ciudad de las Lenguas en Castelló, cuya inauguración está prevista para 2017.

El proyecto del Consell confirma así el final de la iniciativa estrella de Fabra en materia turística para Castelló, una realidad que ya era pública y notoria desde que el Consell disolviera la sociedad encargada de su desarrollo, pero que la diputación ha venido negando. El equipo de Carlos Fabra ha asegurado en los últimos tiempos que el parque temático está sólo en suspenso y que será retomado en un tiempo. El director de Invattur y responsable del plan estratégico dejó ayer claro el futuro del parque temático y afirmó que el plan autonómico 2010-2020 elude Mundo Ilusión. Y la extinción del centro de ocio no lo confirma sólo el Ejecutivo valenciano, sino también los mismos agentes del sector turístico, quienes junto a la administración autonómica y municipios han consensuado este plan estratégico.

Fabra proyectó su parque temático en 1999, que bautizó como Mundo Ilusión, y desde entonces Consell y diputación no han conseguido obtener siquiera los terrenos necesarios, emplazados dentro de un plan urbanístico conocido con el mismo nombre del parque. Tampoco ha quedado definido el objeto del complejo, a pesar de que el Gobierno valenciano ha gastado cerca de 4 millones de euros en innumerables planes de viabilidad.

Ciudad de las Lenguas y golf

El plan estratégico propone para Castelló un incremento de su proyección internacional, aprovechando la próxima apertura de su primer aeropuerto, a través de una oferta singular y diferenciada. Demanda una mejora de su conectividad entre el interior y la costa un fomento de sus recursos naturales y culturales y el desarrollo de campos de golf. A este respecto, recoge como prioridad la Ciudad de las Lenguas de Castelló. Este centro está llamado a convertirse en uno de los hitos arquitectónicos más importantes de la Comunitat Valenciana. Tiene un coste de 200 millones y contempla hoteles, un campo de golf, delfinario, zonas deportivas, restaurantes y una franja dunar, entre otras propuestas.

La Generalitat aspira con este proyecto a atraer 27 millones de turistas a la Comunitat en 2020, frente a los 23 actuales, un objetivo para el que necesitará un incremento de un un 39% más de visitantes internacionales (hasta los 7 millones) y un 10% más de público nacional (hasta 20). En su elaboración han participado 300 agentes turísticos. No obstante, carece de presupuesto y su puesta en funcionamiento depende de la disponibilidad de las diferentes consellerias.

Al acto de presentación de ayer acudieron el presidente del Consell, Francisco Camps, varios consellers y alcaldes de la Comunitat.